1- Según el Consejo Mundial del Oro, las reservas mundiales de oro alcanzan las 187,200 toneladas.
La mayor cantidad está en manos de los bancos centrales, como inversiones privadas y joyas. Con un precio al contado promedio de $1,225 por onza, el valor de la reserva mundial de oro se puede estimar en $7.7 trillones.
¿Esto es mucho o poco? Para comparar, el valor total de todos los billetes y monedas emitidos en el mundo es de $7.6 trillones. Por lo tanto, detrás de cada dólar o euro que haya tenido en sus manos hay oro con un valor más alto.
2- Las principales economías del mundo creen en el oro más que en cualquier otra moneda de reserva.
Estados Unidos de América es el custodio de las mayores reservas de oro del mundo. Posee 8,133 toneladas de oro, que es el 74.5% de sus activos de reserva. Alemania ocupa el segundo lugar en el mundo y el primero en Europa y posee 3,370 toneladas de oro, que es el 69.9% de los activos de reserva de este país.
Los otros diez países con las mayores reservas de oro son: China, Rusia, Japón, Suiza, Italia, Francia, los Países Bajos y la India.
3- El oro ha ganado mayor credibilidad por parte de los bancos centrales en la última década..
A partir de 2010, los bancos centrales de todo el mundo pasaron de ser vendedores netos de oro a compradores netos de oro. En 2017, su actividad aumentó en un 36% y ascendió a 366 toneladas de compras netas, lo que representa un aumento significativo desde 2016.
El año pasado, las ventas brutas en el sector oficial cayeron al nivel más bajo desde 2014 en un 55%, lo que resultó en el hecho de que los poseedores de oro dejaron de vender el que tenían disponible.
El 2018 se convirtió en el año de la mayor demanda de oro de los bancos centrales. Según el Consejo Mundial del Oro, en el primer trimestre de 2018 dicha demanda aumentó un 42% en comparación con el mismo período del año anterior, y la demanda neta fue de 116.5 toneladas.
Esto indica que los bancos centrales prevén un fuerte aumento en el valor del oro, que históricamente se considera un activo de refugio seguro.
4- El oro gana credibilidad creciente entre los inversores profesionales.
A medida que la deuda global sigue creciendo y la economía global se vuelve más inestable, los inversores individuales están invirtiendo activamente en oro, que históricamente se ha demostrado en tiempos de declive económico e incertidumbre geopolítica.
La situación actual es obvia para los inversores profesionales, que otorgan al oro una participación cada vez mayor en sus carteras. Según el Consejo Mundial del Oro, el volumen anual de oro comprado por los inversores ha aumentado en no menos del 235% en las últimas tres décadas.
5- Hoy en día, la tasa de oro se retiene artificialmente en gran parte mediante la adopción de regulaciones que afectan su precio.
Un ejemplo de ello es la “Ley de Protección al Consumidor y Reforma de Wall Street de Dodd-Frank”, que restringió directamente el derecho de los residentes a comerciar metales preciosos, incluido el oro.
Sin embargo, debido a las restricciones regulatorias, el potencial de inversión del oro se ha mantenido igual; está siendo retenido artificialmente, y se le dan preferencias al dinero fiduciario no asegurado, ya que el dinero fiduciario es en lo que la mayoría de los países del mundo basan su economía basada en deuda.
La burbuja financiera del dinero fiduciario no asegurado definitivamente no puede crecer por mucho tiempo.
¿Qué pasará si estalla? La respuesta es obvia: habrá una fuerte depreciación del dinero fiduciario y la necesidad en activos de este tipo que tengan un valor real, principalmente en oro.
6- En el siglo XXI las mejores inversiones son activos respaldados por oro.
Tradicionalmente, el oro como herramienta de inversión tiene varias formas: lingotes de oro, monedas de oro de inversión y polvo de oro. En diferentes países, la compra de oro está sujeta a varios impuestos, incluido el impuesto al valor añadido.
Por lo tanto, los impuestos reducen artificialmente el atractivo de inversión del oro y reducen la tasa efectiva de rendimiento.
En consecuencia, las mejores inversiones son aquellas que se asignan a activos garantizados por oro y poseen todas las ventajas del oro metálico.
7- En el siglo XXI, Gold Standard creó el Oro Físico en forma digital.
En 2018, Gold Standard desarrolló una criptomoneda respaldada por oro físico. Al tener un equivalente de oro, la KBC se puede usar como una herramienta de inversión y como una criptomoneda basada en blockchain específicamente diseñada para ser utilizada como un medio de pago digital generalmente aceptado.
Al estar físicamente vinculado al oro, la nueva criptomoneda es también un instrumento de pago líquido, que permite realizar pagos oportunos y mantener la confiabilidad de las inversiones.
Mediante innovaciones tecnológicas del siglo XXI, el oro no solo ha fortalecido su posición en la economía global, sino que también ha adquirido nuevas formas que le han permitido ingresar con confianza al futuro digital.
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