Una dieta variada y bien equilibrada es la piedra angular de una vida saludable, pues garantiza a la mente y al cuerpo una oportunidad de funcionar al máximo. Hay controversias sobre lo que se debe comer en una dieta equilibrada.
Combatir el estrés mediante la comida
Existen suficientes datos sobre el riesgo que supone comer alimentos refinados y procesados en grandes cantidades. Los investigadores han demostrado las propiedades saludables de la fruta fresca, las hortalizas, las ensaladas, los cereales y comidas integrales. Existen ciertos animales que influyen en el estado de ánimo y consumidos en exceso tendrán una repercusión en el nivel de estrés.
La teoría según la cual un cambio en la dieta refuerza las defensas del organismo ante el estrés no es nueva. El ayuno, los regímenes de desintoxicación y los principios dietéticos del yoga, tienen como objetivo: limpiar el cuerpo, eliminar toxinas nocivas y hacer que los órganos descansen y se recuperen.
Resultados de una comida adecuada
El resultado es un cuerpo más fuerte y un aumento de energía tanto mental como física. Una dieta saludable consiste en varios elementos, entre los más importantes de ellos figuran las frutas frescas, las hortalizas y las fibras.
En los momentos de estrés y cansancio se tiende a consumir ciertos alimentos, que por sí mismos producen estrés. Ciertas comidas influyen en las emociones y el comportamiento. Los efectos inmediatos de algunas de ellas son agradables: el alcohol, por ejemplo, facilita a mucha gente la relajación, pero consumido en exceso, como ocurre con el café, el azúcar y la sal, reduce la capacidad de resistencia al estrés.