Estrategias para no dejar que la ira afecte tu vida laboral y personal
Una reacción de ira puede ir desde un simple enfado hasta reacciones desmedidas en las que se llega a la agresión verbal o incluso física. Es lógico que haya situaciones, palabras o personas que te molesten e incluso que te hagan actuar de forma hostil, pero cuando se pierde el control, tus acciones pueden tener efectos muy negativos a nivel personal, laboral dañando relaciones, haciéndote perder oportunidades e incluso afectando tu propia salud.
Razones que originan sentimiento de ira
Entender las razones por las que nos enfadamos o reaccionamos de forma violenta o inadecuada es el primer paso para buscar la solución.
En términos generales, podemos decir que las principales causas que generan ira son:
- Cuando nos sentimos frustrados por la acción o falta de acción de alguien, por los resultados de una tarea o por las críticas.
- Cuando percibimos una situación como injusta.
- Cuando sentimos amenazada o menospreciada nuestras ideas o bien objetos o personas que sean importantes para nosotros.
Estrategias para manejar la ira
El manejo de la ira es una herramienta de manejo de estrés con el que se podrá reducirlo considerablemente. Esto implica aprender a calmarla antes de que genere actitudes o reacciones negativas descontroladas.
Lo primero es reconocer que tienes un problema, si no aceptas que has perdido el control sobre la ira, no podrás buscar el origen de la misma ni tampoco las soluciones.
Algunas estrategias de gran utilidad para el manejo de la ira son:
- Apunta durante cierto tiempo los momentos en que has sentido ira para encontrar con qué frecuencia perdemos el control y cuáles son los motivos que suelen despertar en nosotros este sentimiento. ¡Solo conociendo estos motivos podremos buscar soluciones!
- Si tienes problemas para mantener a raya tus reacciones hostiles, acude a personas de tu confianza para que puedan apoyarte en el proceso. Si no puedes tú solo o con la ayuda de personas cercanas, tal vez necesites la ayuda de un profesional.
- Cuando empieces a sentir ira en una determinada situación intenta detener el proceso. Lo puedes hacer a través de técnicas como:
- Respiración profunda
- Pensamiento positivo
- Visualización positiva
- Contar hasta 10 antes de reaccionar negativamente.
- Ve a un sitio donde puedas tranquilizarte
- Busca alguna distracción como escuchar música, caminar un poco, leer, etc.
- Objetividad, empatía y asertividad: Tal vez lo más importante en este proceso es aprender a ser objetivo, empático e intentar que tu comunicación sea asertiva. No siempre los demás tienen la razón, pero tampoco tú tendrás la razón en todas las circunstancias, y es por esto que ser objetivo y empático es importante.
Si es una persona la que te hizo reaccionar con ira, el tratar de ver la situación desde el punto de vista de la otra persona te va ayudar a relativizar. Tal vez tu reacción ha sido desmedida y no lo veías así, tal vez esa persona no tuvo una mala intención al decir o hacer lo que hizo.
Además, ser asertivo en nuestra comunicación es tomar en cuenta también la forma de pensar y sentimientos de las otras personas, esto nos ayudará mucho en la vida laboral y personal. Para esto es muy importante saber escuchar.
- Relajación: Tómate las cosas con calma, también es bueno que realices ejercicio de forma regular, duermas suficientes horas, sigas una dieta saludable y en términos generales busques que tu vida personal y laboral tenga un nivel de calidad bueno para que no estés en permanente tensión, lo que podría hacerte estallar más rápidamente o antes cosas poco importantes. Hay que relativizar.
Estas pautas para el manejo de la ira pueden funcionar mejor en unos momentos que en otros, lo que puede funcionar para ti hoy, puede no hacerlo para otra persona, pero lo importante es no dejar llegar la situación a un nivel de agresión física o verbal que pueda ser destructiva.
Fuente: http://aulainteractiva.org/