Una
pregunta que nos solemos hacer con frecuencia es como distinguir entre
un huevo fresco y uno conservado. Las diferencias a simple vista son
varias:
- El
huevo fresco presenta una cámara de aire en el polo mas obtuso mayor
que el huevo conservado por ello al meter un huevo en un vaso de agua
si es fresco flota (por el aire de la cámara) si es conservado se hunde
(por que la cámara de aire es menor). - El huevo fresco presenta al
cascarlo una yema redonda y pomposa, en el huevo conservado la
separación entre yema y clara no es tan evidente y se mezclan, además
la yema no es tan pomposa. - El huevo fresco presenta una clara recogida, mientras que la clara del huevo conservado tiende a esparcirse con mayor facilidad.