Es muy importante tomar un buen desayuno, incluso si no tenemos hambre.
Muchos estudios muestran que la gente que desayuna algo cuando se
levanta se siente mucho mejor física y mentalmente a lo largo del día.
Lo ideal es comenzar el día comiendo pan y si es posible integral, ya
que este contiene carbohidratos que son esenciales para estimular la
producción de serotonina, que es un neurotransmisor encargado de
producir bienestar y placer en nuestro organismo. Incluso un grupo de
investigadores británicos ha descubierto que desayunar un tazón de
cereales reduce sensiblemente una hormona relacionada con el estrés. Así también la leche es muy importante porque contiene triptofano el
cual es un aminoácido que ayuda a que la serotonina sea metabolizada
más rápidamente en nuestro cuerpo, esto hace que estemos equilibrados y
con muy buen humor.
