A pesar de que la mayoría de las parcelas son rectangulares, no hay porque limitarse a esta forma a la hora de diseñar el jardín.
Los jardines rectangulares tienden a dar un aspecto de formalidad al jardín. Construir un jardín circular puede ser una forma de dar color así como de resaltar algún elemento en un clásico jardín rectangular.
Esta disposición le dará un toque informal y conseguirá suavizar las líneas rectas de la parcela. Construir un jardín circular es un proyecto fácil, que usted mismo puede realizar en un fin de semana con un coste bastante bajo.
El primer paso a la hora de acometer esta obra es hacer un pequeño plano del terreno del que disponemos y ubicar el jardín circular. Hay que buscar un tamaño intermedio para que no quede ni demasiado grande ni demasiado pequeño en la parcela.Una vez decidido el tamaño y la ubicación hay que empezar por limpiar el terreno. Retire las plantas y los arbustos. Tenga especial cuidado con estos últimos y a la hora de trasplantarlos haga un hoyo suficientemente grande para no dañar las raíces. Con un metro determinará el ancho del círculo exterior y marque la circunferencia. Después, marque el círculo interior.
Para determinar la forma circular se deben colocar sobre el terreno unas losas que pueden ser del material y tamaño que se prefiera, dispuestas en forma de rayos de sol a partir del círculo interior. Colóquelas con la cara más vistosa hacia arriba desde el círculo interno hacia el externo, dejando entre cada una de ellas una distancia de unos 10 cm. en el borde del círculo interno. Con un instrumento punzante, trace una marca alrededor de las losas y retírelas. Después hay que cavar un pequeño lecho del grosor de las losas para que queden a igual altura que el suelo. Introduzca las losas en los agujeros y rellene con tierra los bordes en caso de ser necesario, hasta lograr que la losa quede al mismo nivel que el resto de la superficie.
Son muchos los objetos que se pueden utilizar para adornar la parte central de un jardín circular: fuentes, urnas cerámicas, macetas decorativas, tinajas, etc. Sea cual sea el que usted elija, lo que tiene que hacer es muy sencillo. Simplemente incruste en el terreno una losa circular en medio de la circunferencia, asegurándose de que el nivel es el adecuado y coloque el objeto que haya elegido en el centro.
Una vez llegado a este punto, el paso siguiente es introducir los elementos vegetales. Alrededor del jardín circular lo más usual es plantar césped. Para ello habría que limpiar el terreno. Para complementar esta parte central una opción es llenarla de colorido con, por ejemplo, flores de color amarillo, naranja, azul y blanco. Una recomendación es utilizar plantas anuales y cambiarlas cada estación para así mantener los colores vivos durante el año.
Un efecto colorista pero ordenado se consigue plantando anillos de un solo tipo de flores en torno al círculo central. De este modo también se resalta el objeto que se haya colocado en el centro. Se puede utilizar una cubierta vegetal entre las losas para resaltar la disposición en forma de rayos de sol y se puede añadir un último anillo de flores de colores vibrantes para cerrar el jardín circular. Entre las plantas a utilizar puede estar la Lobelia erinus para el anillo exterior, el Alyssum spinosum para plantar entre las losas, la Viola y la Tagetes patula.