NUTRICIÓN: DIETA KUHENEMANN
Once libras (cinco kilos) menos en 15 días
Nada de dejar el régimen para el lunes. La primera condición de la dieta Kuhnemann es comenzarla el viernes. Superado el fin de semana, el éxito de este plan de adelgazamiento está asegurado.
Recomendaciones
* El viernes, sólo fruta, al natural o en jugo.
* La fruta garantiza el aporte de vitaminas que necesita el cuerpo.
* El tercer día de dieta se pueden consumir verduras en forma de sopas o cremas.
* Los platos que se ingieren con cucharilla son muy importantes en este régimen.
* La dieta se puede prolongar hasta una tercera semana, sin que se ponga en peligro la salud.
* Los enfermos del riñón e hipertensos deben consultar a su médico.
Poco o nada de ejercicio
Como durante el fin de semana la cura Kuhnemann suprime de manera drástica las proteínas (carne, pescado, lácteos…) y los pocos hidratos de carbono que se consumen son los procedentes de frutas y verduras, es frecuente que aparezcan estados de debilidad asociados a la dieta. Estos desaparecerán rápidamente en el momento que la alimentación vuelva a ser normal. Pero por precaución, los especialistas aconsejan hacer vida sedentaria durante los fines de semana que dure la dieta. Mucha cama, mucho sillón y poco o nada de ejercicio. ¡De hecho para eso es el fin de semana, para descansar!
Un método muy original para adelgazar es el que diseñó la doctora Antje Schaeffer-Kuhnemann. Su libro fue todo un bestseller al comienzo de los noventa y su dieta tuvo tal éxito, que en Munich todavía hay clínicas en las cuales continúa vigente. Su mayor originalidad es que hace desterrar ese dicho ya tan extendido y mil veces repetido por la mayoría de las personas obesas de que: “el lunes me pongo a dieta”. Una expresión que, pese a encerrar el buen propósito de poner freno por fin al ascenso de la aguja de la balanza, incluye también el permiso velado de continuar comiendo hasta la saciedad de todo aquello prohibido durante todos los días que restan hasta el “fatídico” lunes.
Comienza el viernes
El primer y gran mandamiento de la dieta Kuhnemann es que el régimen hay que iniciarlo un viernes. No vale ningún otro día. De hecho, la doctora recomienda que siga otro plan de adelgazamiento, si no se pretende cumplir este precepto. Porque el hecho, de elegir el viernes no es casual en absoluto y lo único que pretende es evitar esos excesos que todos, incluso los que están sometidos al régimen más inflexibles, cometen a lo largo del fin de semana (cuando hay más tiempo para las relaciones sociales y para disfrutar de la buena mesa).
La cura del viernes recomienda, por tanto, todo lo contrario a lo habitual. Viernes, sábado y domingo serán días de ayuno o semi-ayuno en los que apenas nos alimentaremos de fruta y caldos de verduras y sólo a partir del lunes, cuando nos reincorporemos a nuestras tareas habituales, podremos volver a comer de la manera habitual.
De lunes a jueves
De lunes a jueves, aunque se puede comer prácticamente de todo -a excepción de dulces y grasas-, el aporte energético es muy reducido: unas 1,100 calorías diarias. Y esto es lo que permite que el organismo no recupere el peso perdido durante los tres primeros días de ayuno, pudiendo llegar incluso hasta hacer descender la balanza una libra (un kilo) más. Sin embargo y, para que la dieta sea realmente efectiva, conviene hacerla durante dos semanas consecutivas, pudiéndose repetir hasta una tercera sin que por ello se resienta nuestra salud, ni aparezcan síntomas de estados carenciales. De esta manera, se pueden llegar a perder entre 11 y 22 libras (cinco y diez kilos) de peso, dependiendo del grado de obesidad.
Menú de la semana
* Viernes:
Día de fruta: A lo largo de toda la jornada lo único que se puede comer es fruta, bien natural o en forma de jugo recién exprimido. Están permitidas: manzanas, uvas, peras, naranjas, mandarinas, fresas, piña, melocotón y kiwis. También se admiten zanahorias o tomates, aunque no se puedan considerar propiamente como frutas. Están prohibidos, sin embargo, plátanos y aguacates. Para ayudar a depurar el organismo de toxinas se recomienda completar el “menú” con salvado (bran) en polvo, pastillas o semillas de lino. La cantidad a tomar será exactamente la mitad de lo que recomienden los envases como dosis diaria.
* Sábado:
Fruta y calditos: El Segundo día de dieta sólo se puede comer:
A)Toda la fruta que se desee, bien al natural o en forma de jugo, recién exprimido (siguen totalmente prohibidos plátanos y aguacates).
B)Salvado (bran) en pastillas o en polvo y semillas de lino. La dosis continua siendo la mitad de la recomendada en los envases.
C)Dos o tres caldos de verduras, preparados con zanahorias, cebolla, ajo, pimiento rojo, tomate y una pastilla o cubito de caldo de ave. Se deja cocer durante cuarenta y cinco minutos y se toma después de colado.
D)Tres claras de huevo (crudas o preparadas como una tortilla francesa).
* Domingo:
Fruta y verdura: Con esta tercera jornada se termina el semi-ayuno. A lo largo del día se puede ingerir:
A)Toda la fruta que se desee, bien natural o en forma de jugo recién exprimido (salvado o bran, plátano y aguacates).
B)Salvado o bran y semillas de lino, en la misma dosis que los dos días anteriores.
C)Dos o tres sopas de verduras, repartidas a lo largo del día, preparadas con zanahoria, ajo, cebolla, pimiento rojo, repollo y una pastilla o cubito de caldo de ave. Se deja cocer durante 45 minutos y se toma en forma de sopa o de crema (triturada la verdura).
* Lunes:
Termina el ayuno y los menús se tornan normales.
Desayuno: Jugo de naranja (china) recién exprimido, café o té con leche desnatada y sacarina y una tostada de pan de harina integral con margarina vegetal y mermelada de dieta.
Merienda: Uno o dos pedazos de fruta (no valen plátanos).
Almuerzo: Ensalada americana (de repollo y zanahoria con salsa ligera de yogur), un filete de pollo a la plancha y una manzana.
Merienda: Un yogur natural desnatado.
Cena: Judías verdes, una rodaja de merluza al vapor y un pedazo de fruta.
* Martes:
Desayuno: Jugo de naranja recién exprimido, café o té con leche desnatada y sacarina y una tostada de pan de harina integral con queso fresco.
Merienda: Un yogur natural desnatado con pedazos de manzana.
Almuerzo: Ensalada de tomate, un plato pequeño de lentejas estofadas con patata, zanahorias y tomate y una ensalada de frutas frescas.
Merienda: Un café o té con leche desnatada y sacarina y dos galletas integrales.
Cena: Guisado de verdura, un filete o una rodaja pequeña de salmón fresco a la plancha y un pedazo de fruta.
* Miércoles:
Desayuno: Jugo de naranja recién exprimido, café o té con leche desnatada y sacarina y una rebanada de pan de centeno con dos lonjas finas de pechuga de pavo.
Merienda: Dos pedazos de fruta o un jugo natural.
Almuerzo: Crema de ajos, un plato pequeño de espaguetis integrales con tomate (hecho en casa) con queso fresco bajo en calorías.
Merienda: Una manzana o dos peras.
Cena: Espárragos blanco con mayonesa ligera, un filete pequeño de emperador a la plancha con una porción de lechuga y un yogur natural desnatado.
* Jueves:
Desayuno: Jugo de naranja recién exprimido, café o té con leche desnatada y sacarina y una tostada de pan integral con margarina y mermelada baja en calorías.
Merienda: Un yogur natural desnatado.
Almuerzo: Ensalada mixta, cordero asado con una patata pequeña también asada y,de postre, fruta.
Merienda: Un batido de fresas (con fresas frescas y leche desnatada).
Cena: Un plato pequeño de ensalada campera (con patata, tomate, pimiento verde, cebolla, un huevo cocido y una lata pequeña de atún) y fruta.