El sentirnos bien depende no solo de nuestras situaciones o circunstancias de vida. Sentirnos bien muchas veces puede ser una decisión. Sin embargo, en ocasiones es una decisión que es difícil tomar. Puede ser que requiera hacer cambios en nuestras costumbres o en nuestra manera de interpretar nuestra realidad. Puede ser que sea necesario también poner en orden nuestras prioridades o el valor que otorgamos a algunos elementos de nuestra existencia. O bien puede requerir esfuerzos en otra dirección. En ese proceso, que definitivamente nos conduce a desarrollarnos en lo personal, en ocasiones podemos necesitar ayuda. Solicitar ayuda profesional es, sin duda, un buen comienzo. Sin embargo, la búsqueda del terapeuta adecuado puede generar algunas dudas o temores. Posiblemente, esas inquietudes te han guiado a hacer búsquedas en la red. Me alegra que hayas llegado hasta mi página. Aquí podrás conocer sobre los servicios que ofrezco en mi consultorio. Nuestros servicios actualmente incluyen la psicoterapia individual, familiar, de pareja y grupal dirigida a niños, adolescentes y adultos. La mayoría de las personas buscan mis servicios para trabajar con su depresión, ansiedad, baja autoestima, problemas académicos, conducta autodestructiva, problemas de conducta en niños o adolescentes, conflictos de pareja, problemas de comunicación familiar, entre otros. Mi formación cristiana permea de manera no impositiva en el proceso psicoterapéutico, entendiendo que Dios tiene poder para sanar y restaurar nuestras vidas. Si has identificado que necesitas ayuda, ese es ya un gran comienzo. Solo necesitas empezar a hacer los cambios que te permitan disfrutar de una vida plenamente feliz. ¡Sí! ¡Es posible! Pero tal vez necesitas alguna dirección en tu proceso. Los psicólogos somos personas adiestradas para ayudar en ello. Me gustaría mucho que me dieras esa oportunidad. Con tu determinación y la ayuda adecuada puedes comenzar ya tu travesía hacia el mejoramiento personal y/o familiar.
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