El aura es un campo de energía que se emana, que ayuda a encontrar el verdadero estado interior.
El aura permite descubrir tanto las cuestiones más materiales como aquellas otras más espirituales.
En el aura se diferencia entre el color básico (el que más se repite) y los colores secundarios. El color básico es permanente y sólo muta en circunstancias muy específicas. Expresa las cualidades positivas y negativas de cada ser vivo u objeto. En cambio, los colores secundarios ayudan a comprender el estado interior momentáneo.
Para averiguar que colores emana el aura, bien sea de una persona, un animal, una planta o un objeto, se recurre a la cámara Kirlian. Esta cámara nos permite observar el aura y su evolución. Sin embargo, no siempre podemos contar con este instrumento. En estos casos, se recurre a otros métodos, igual de eficaces, para comprobar el estado del campo energético como son el péndulo, la meditación o nuestra propia vista.
Significado del color del aura y las plantas.
Las plantas tienen su propia aura. Ésta nada tiene que ver con el color de sus flores, sino con el color que prevalece por encima de los demás en ese destello de energía que irradia.
Conocer el aura de nuestras plantas nos permite saber cuál es su estado de ánimo. Esta es una cuestión individual, independiente de la especie, variedad o género de la planta.
De este modo, cada color indica o se relaciona con un aspecto diferente:
- El rojo está asociado al crecimiento.
- El naranja indica la producción de semillas o el despertar de las flores.
- El amarillo significa falta de vitalidad, especialmente si el color es poco intenso.
- El color dorado simboliza la suavidad y los fluidos positivos.
- La predominancia del verde demuestra la emisión de fuertes ondas de energía positiva, siendo muy habitual en plantas que poseen propiedades curativas.
- El azul indica propiedades tranquilizantes y analgésicas.
- El violeta es señal de una fuerza positiva, hasta el punto de que las violetas y las flores de lotos (símbolos de la espiritualidad) suelen tener el aura de ese color.
- El cristal (especie de niebla brillante y blanca) tanto puede ser positivo como indicar falta de vigor y vulnerabilidad.