UA

 

En terrenos con una determinada inclinación las escaleras son la solución más adecuada a la hora de proyectar un jardín. Además, son múltiples las posibilidades creativas que nos ofrecen.

Cuando el terreno en el que vamos a proyectar nuestro jardín es abrupto o inclinado se hace imprescindible crear diversos niveles. Los escalones serán nuestros mejores aliados y nos ayudarán a crear ambientes fantásticos y nos ofrecerán grandes oportunidades paisajistas.

La transformación que se produce en una ladera inclinada con la introducción de escalones puede ser magistral. La desnivelación de ese terreno adquiere, de este modo, un significado, tiene un propósito y contribuirá a crear un ambiente creativo en el jardín.

escaleras-jardin
Por lo tanto, el hecho de que nuestro terreno sea inclinado no tiene porqué ser una desventaja ni un inconveniente, aunque algunas partes del mismo se semejen más a la ladera de una colina. Los cambios de nivel nos darán la oportunidad de definir áreas diferenciadas en el jardín, de marcar la transición desde cada una de estas áreas a las otras.

Los escalones tienen, por ello, una dimensión doble: por una parte es de tipo ornamental y por otra parte es de tipo práctico. De hecho, en los terrenos que son planos, los diseñadores tratan de crear artificialmente algún tipo de desnivel incorporando tierra en unos lugares o retirándola de otros.

En el impacto que causen los escalones va a influir mucho la pendiente y el tamaño del jardín. Si el desnivel es muy abrupto y tenemos que instalar muchos escalones podemos utilizar la vegetación para disimular su impacto y para integrarlos más en el conjunto del jardín. Aunque los escalones y los bancales o terrazas no son elementos naturales, dependerá mucho del estilo que les demos, de los materiales y del diseño que escojamos el hecho de que destaquen más o menos en el conjunto del jardín.

Las escaleras grandes y amplias están normalmente diseñadas para impresionar. Son por sí mismas un importantísimo elemento ornamental del jardín. Por otra parte, los pequeños escalones entremezclados con la vegetación darán un aspecto más naturalizado e integrado.

Son muchísimos los jardines donde nos encontramos con escaleras. Muchas veces un edificio importante está precedido por una gran escalinata, que no hace otra cosa más que indicarnos que se ha llegado a un lugar destacado. De este modo se añade curiosidad, respeto ante lo que nos vamos a encontrar. Es habitual encontrar este tipo de jardines en palacios o grandes caseríos.

Los escalones de jardines más domésticos e informales suelen estar hechos de materiales naturales, como la piedra, la madera, o incluso grava o cortezas. Es también muy habitual dejar entre escalón y escalón un espacio para la vegetación. El objetivo principal de este tipo de escalera es formar parte integral del jardín, tal y como lo pueden hacer las plantas o el césped.

Los escalones están muy presentes en los jardines contemporáneos. Cuando se colocan de forma aislada, sin vegetación que los disimule, se suele procurar que marquen estructura y que añadan énfasis a la misma. Los escalones escarpados tallados en la roca también crearan una apariencia muy contemporánea.

Las transiciones en los jardines se pueden marcar a través de escalones. Un simple escalón puede marcar la transición entre una zona del jardín y otra. Por ejemplo, si queremos dedicar una zona de nuestro jardín para plantar legumbres, diferenciada del resto del jardín ornamental, una distinta nivelación entre una zona y otra marcada por un escalón puede ser la solución.

https://analytics.google.com/analytics/web/?authuser=0#/a19873651w39653599p39359059/admin/integrations/adsense/editor/MELVhoLOS4O55HAh2VocUA