Destete del Bebé
Existen muchos bebes que les cuesta renunciar al pecho. Sin embargo, no debemos preocuparnos ya que la lactancia materna puede prolongarse, pero llegará el momento en que deba ingerir otro tipo de alimentos y nutrientes necesarios..
¿Hasta que edad es saludable que el bebé siga mamando?
Se recomienda exclusivamente la lactancia materna de cuatro a seis meses, si agua, jugos, infusiones ni papillas, y después lactancia combinada con otros alimentos adecuados, esto significa que a partir de esa edad el niño modifica su régimen; puede seguir mamando al tiempo que se introducen otros nutrientes al ritmo habitual los médicos son partidarios de que además de darle alimentación sólida, continúe dando pecho al niño hasta los dos años o más.
No olvides que te debe guiar tu pediatra en esto, todos los pediatras tienen su propio criterio Alrededor de los seis meses la mayoría de los niños requieren de otros alimentos, además de la leche materna.
El orden en que se introducen no es importante; en algunas ocasiones se comienza con frutas, en otras con verduras y cereales en realidad no se pueden dar normas estrictas
No existe ningún inconveniente en que él bebe siga mamando pero, ¿cómo deberíamos actuar si él bebe se resiste y no le interese la comida complementaria? La Academia Americana de Pediatría sostiene que los alimentos que se proporcionan al niño deben ser en pequeñas cantidades y de a uno, con un intervalo de siete a diez días, con el objetivo de comprobar si le sienta bien al organismo del bebé, por ejemplo el primer día se podría comenzar con una mínima dosis de fruta ya sea papilla de manzana, plátano o pera (esto según la estación en que nos encontramos) se prepara aplastando la fruta con un tenedor.
No se extrañen si la primera reacción del bebé es escupir o rechazar el alimento ya que se encontraba acostumbrado al sabor de la leche materna, lo más normal es que se resista y no quiera seguir comiendo, a esa edad tiene la costumbre de cerrar la boca y no debemos caer en el error de obligarlo se le podría provocar un rechazo aún mayor e iniciarse un problema de alimentación, hay que insistir con paciencia, suele aceptarlos con lentitud por eso es preferible darle a conocer estos nuevos sabores individualmente, además si no tolera ese alimento por que le produce diarreas, alergias…, sabremos enseguida cuál ha sido, no es conveniente agregar sal o azúcar a las papillas.
Nadie mejor que la madre para saber cuándo puede realizar el primer intento de darle al bebé comida diferente. El destete debe darse cuando la madre y el hijo se encuentren en condiciones de hacerlo no debes dejarte influenciar por pariente o tu cónyuge para llevar a cabo este magno evento.
Hasta que el niño no cumple 1 año no es frecuente que se salten tomas de leche, al principio las papillas se pueden dar después de mamar. El alimento principal sigue siendo la leche materna; lo demás solo es un complemento, a las papillas de cereales no se les debe agregar leche, por que el bebé ya toma suficiente del pecho de su madre.
Cuando el bebé ya acepta alimentos sólidos, se los puede amamantar después de algunas comidas, como si se tratara del postre.
El último paso del destete es el más difícil, radica en que el pequeño deje definitivamente de mamar y pase a realizar las cuatro comidas.
Las verduras al igual que las frutas contienen muchas fibras que son buenas para el intestino, las verduras se pueden empezar a dar con caldos por que su sabor es más suave, comienza a darle una o dos verduras diferentes y poco a poco añade otras, incorpora los purés o papillas que deben estar bien machacados para hacer más fácil la ingestión.
A los siete meses, es una buena edad para que comiences a darle a tu bebé un poco de carne, de preferencia pollo, ternera y pescado suave. Estos tienen proteínas y hierro que son básicos para la alimentación de tu pequeño.
A partir de los 8 meses ya puedes darle a tu bebé productos lácteos como quesos duros, yogurt, etc., pero has de tener en cuenta que éstos no son estrictamente necesarios, en caso de continúes con la lactancia materna.
A los 9 – 10 meses puedes incorporar a tu bebé en la dieta familiar.
Cuando el bebé tenga 2 años debería estar comiendo todos los alimentos, lo más aconsejable es que por un periodo corto le repitas los alimentos para que se adapte a ellos trata que su dieta sea variada y atractiva y que incluya todos los grupos de alimentos para garantizarle una buena nutrición.
Abandonar la lactancia natural le supone un esfuerzo físico (digestión de alimentos) y emocional (independizarse de su mamá). No se le debe exigir este cambio si sufre cualquier trastorno (diarrea, enfriamiento…) o no está adaptado al nuevo régimen de vida (sala cuna, viajes…). En caso de enfermedad, algunos pequeños vuelven a mamar casi exclusivamente durante unos días hasta que están recuperados totalmente.
No se malcría al hijo si continúa mamando una o varias veces al día. Si lo pide, conviene dárselo para evitar que se convierta en algo prohibido, es un momento en que la madre y el hijo suelen disfrutar enormemente.
Cabe recordar que la última toma de la noche tranquiliza al niño y lo ayuda a dormir mejor.