Participación [16-03-2020]
La solidaridad, aquel concepto donde todos compartimos nuestra humanidad, esa realidad que como personas nos vincula de manera inmediata e irrevocable con el resto de la comunidad humana, donde cada familia individual está llamada a ser una expresión de amor y solidaridad, testigo de lo mismo ante el mundo. Sin embargo, para que la participación sea significativa, debe practicarse y elegirse conscientemente, complementarse y realizarse del entorno al contorno.
De nada serviría, moralmente hablando, por ejemplo, que la ayuda solidaria que se ofrece a los mayores en los portales, en los barrios, en las redes sociales, de manera altruista por y para desconocidos, no se ofreciera y aplicara para con nuestros mismos padres, madres, abuelos o cualquier allegado, recordando que nuestra presencia, no necesariamente física por necesidad sanitaria o en redes sociales, de las que no disponen la mayoría, puede ser simplemente telefónica, otra forma de acompañamiento y de demostrar nuestro interés y amor por ellos.
La voluntad de practicar la participación mientras se lucha por la superación de los desastres o aflicciones sociales es la virtud social de la solidaridad. Por tanto, la capacidad de reconocer y aceptar toda la gama de deberes y obligaciones correspondientes que son necesarios para la superación de las tribulaciones a las que pueda estar sometida una sociedad, sólo pueden ocurrir en una atmósfera animada por la solidaridad.
De todas formas, somos más los solidarios, muchos más; y yo tengo Fé.
“Llevadera es la labor cuando muchos comparten la fatiga.” Homero
Perdonadme hoy si me he puesto un poco peñazo. Era lo que sentía.
Para que no desentone, aunque no es la más alegre y está provista de una gran carga dramática, como los tiempos que corren, os voy dejar una bellísima pieza de Erik Satie, “Gnossiennes: No. 1. Lent”, al piano Marcel Worms, para mí uno de los mejores intérpretes de esta obra de arte.
Buen día a tod@s!!!