Las palabras construyen realidades internas y externas [01-07-2020]
Las palabras son poderosas, son los ladrillos que construyen nuestros textos o parlamentos. Dan forma a lo que nos rodea, designan, describen, narran, ofenden, alaban, muestran, esconden, animan, deprimen, defienden, atacan…
Las palabras nos permiten conectar con las personas, pero también son protagonistas de nuestro diálogo interno. Las palabras son capaces de crear, pero también de destruir. Son capaces de comunicar respeto, pero también su falta. Con ellas podemos originar cercanía, pero también podemos establecer distancias insalvables. Pueden ser de aliento, pero pueden provocar desánimo.
A veces su ausencia puede infringir uno de los peores castigos, la indiferencia.
A las palabras,por mucho que se diga, no se las lleva el viento, son, existen y están. Pueden perdurar milenios, de ahí que sea importante el diálogo positivo con los demás, pero sobre todo con nosotros mismos. Si nosotros no nos dedicamos bellas palabras de vez en cuando, quién lo hará. Hemos aprendido a dedicar bonitas palabras a los demás, pero qué pasa con nosotros. Pues que podemos construirnos a nosotros mismos desde el diálogo interno, a través de las palabras que quedan en nuestra mente, en nuestro corazón, que van construyendo el camino que les indicamos.
Las palabras construyen realidades internas y externas, por eso deberíamos cuidarlas. Si el vocabulario que empleamos es triste y pesimista, así será nuestra vida, porque aunque deseemos lo mejor para nosotros mismos, si con nuestras palabras declaramos todo lo contrario, estaremos impregnando de incoherencia nuestra existencia y lo que deseamos es más que probable que nunca llegue a cumplirse.
Probemos a cambiar las palabras que dirigimos a los demás y a nosotros mismos, encontremos las más adecuadas, positivas y funcionales. Quizá tan solo cambiando la forma de decirlo, ya estemos cambiando el contenido. El lenguaje está a nuestro servicio para ayudar y dar forma a nuestras ideas, podemos ser escritores de nuestras vidas, podemos redactar un guión repleto de fuerza, de mensajes que impulsen y no limiten, porque uniendo letras tenemos en nuestros labios o en nuestra pluma la posibilidad de cuidar o maltratar, de cuidarnos o maltratarnos. Podemos hacer muchas elecciones en esta vida, entre ellas, de las más importantes, están las palabras. Podemos y debemos elegir bien las palabras.
Buen día a tod@s!!!
Os quiero Bandid@s!!!
“Todo está en la palabra… Una idea entera se cambia porque una palabra se trasladó de sitio, o porque otra se sentó como una reinita adentro de una frase que no la esperaba y que le obedeció. Tienen sombra, transparencia, peso, plumas, pelos, tienen de todo lo que se les fue agregando de tanto rodar por el río, de tanto transmigrar de patria, de tanto ser raíces… Son antiquísimas y recientísimas…” Pablo Neruda
Y para decirnos todas las cosas que somos…pero sin palabras esta vez…la música también es un lenguaje del alma y el jazz es un dialecto encantador…ahí os dejo con Oscar Peterson Trio…ya suena “All The Things You Are”…