Para encontrar las soluciones, para verlas si las hay, para inventarlas si no “existen” [27-07-2020]
Hay momentos en la vida, y no son pocos, en que nos vemos abrumados por los problemas. Generalmente en plural, porque es extraño que éstos vengan solos.
Recuerdo que una persona, la cual me ayudó mucho y me abrió los ojos, me dijo una vez que los problemas: de uno en uno. Que cuando se acumulan hay que desagruparlos para que no nos abrume la montaña, hay que desmontar la montaña piedra a piedra, roca a roca. También me explicaba que el significado de que dotamos al término “problema” es muy importante. Todo depende de como los percibamos, a grandes rasgos: como algo negativo, paralizante y aterrador o como verdaderos desafíos, oportunidades para realizar cambios y motivación para buscar soluciones.
Entonces, todo depende de como los percibimos, pero en cualquier caso, los desafíos y los problemas son parte inevitable de la vida. Por lo que en realidad, un problema no es el “problema”. El verdadero problema, el auténtico obstáculo, es nuestra actitud frente al mismo.
Podemos creer que no es posible cambiar nuestra manera de pensar y actuar, quizá porque están ambas tan afianzadas que parecen inamovibles y entonces caeremos en la obcecación de actuar siempre igual, de hacer siempre lo mismo o incluso de optar por eludir los problemas, de cerrar los ojos para no verlos. Pero siempre seguirán ahí, e incluso se consolidaran y crecerán como un tumor.
O bien, podemos enfrentarnos a ellos, aventurarnos a buscar soluciones creativas, nuevas formas de afrontar los retos. Meternos de lleno en el fuego para resurgir como un Ave Fénix, quemando en el proceso las viejas e inservibles estructuras mentales, de pensamiento o de conducta, para dejar paso a un renacimiento que reemplace éstas por nuevas formas y maneras creativas que nos eleven sobre los problemas para observar con perspectiva. Para encontrar las soluciones, para verlas si las hay, para inventarlas si no “existen”.
Buena tarde a tod@s!!!
Os quiero Bandid@s!!!
“(…) No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países porque la crisis trae progresos. (…) Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis es la crisis de la incompetencia. El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desafíos; sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. (…)” Albert Einstein, fragmentos de “Mi visión del mundo”
Bueno con la canción de esta tarde no he tenido problema al escoger…”No Problem” de Chet Baker Quartet, diez minutos de buen jazz con Duke jordan al piano y Chet Baker a la trompeta…nunca es tarde…