Estas son las principales características que ha de tener un jardín para el descanso y el equilibrio alejado de nuestra desenfrenada agitación diaria.
Todos los días parece que una parte de nuestras vidas es tomada por la tecnología, rara vez nos separamos del teléfono móvil, tráfico, prisas, ajetreos, etc. Estamos inmersos en la edad digital. Pero en el jardín encontramos el contrapeso necesario para no sentirnos lejos de la naturaleza. Esta es la razón por la que mucha gente se siente atraída por actividades como el bricojardín.
Existen varios factores fundamentales que se han de tener en cuenta a la hora de construir un lugar para el descanso y la meditación en el jardín:
– Separación: Esta característica es necesaria, no sólo por cuestiones de tranquilidad, sino también por privacidad. Si vive en una ciudad, le será prácticamente imposible encontrar un lugar ligeramente aislado, por lo que será necesario instalar un cierre. Elija aquellos que utilicen las mejores técnicas para permitir el paso de luz y aire, sacrificando una pequeña parte de las vistas.
Lo mejor es la instalación de muros, aunque son muy caros y demasiado sólidos. Siga el estilo de los jardines islámicos cuyo elemento central se encuentra en el interior del recinto bordeado por muros.
Si prefiere decantarse por una opción más barata puede instalar cercos sobre los que se puede hacer crecer una enredadera, como: la Lonicera sempervirens, la Lonicera heckrotti, la Clematis, la Clematis amandi y el Jasminum polyanthemum perfumarán el aire siempre y cuando hayan florecido. Cuando los edificios adyacentes no permitan este tipo de construcción, la única solución posible será instalar setos.
Una buena solución para los climas más calurosos es la instalación de árboles como la Sequoia sempervirens, pues este árbol crece rápidamente y prefiere disponer de poco espacio; además, cuando se desarrolla en primavera, su color verde brillante crea un contraste sorprendente sobre un fondo oscuro. Para los climas más templados lo mejor es la Syzygium paniculatum o una de las especies menos invasivas de bambú.
– Ruido: El ambiente ruidoso de la ciudad: los vecinos, el tráfico, etc. amenazan el disfrute de la paz, por lo que todo jardín para el retiro ha de disponer de una fuente cuya agua enmascare estas molestias. A la hora de elegirla no solo ha de fijarse en su diseño, sino que también ha de tener en cuenta la cantidad de agua que por ella fluye, pues este es un factor fundamental para que haga el suficiente ruido como para mitigar los ruidos de la ciudad.
– Imágenes: En las religiones del este, se concibe el jardín como un microcosmos de naturaleza y esta es toda la imaginería que se necesita. Cada piedra, cada planta puede llegar a ser un foco de meditación. Estos jardines poseen pocos elementos pero seleccionados y dispuestos con gran detalle.
En el oeste la imaginería simbólica es más importante, con jardines que cuentan normalmente con una obra de arte que es el punto central del mismo y que representa algo muy significativo para la religión en cuestión. Puede ser algo tan simple como una escultura de una diosa o más específico como una estatua de San Francisco de Asís. Esta elección ha de ser personal para hace que el espacio sea más íntimo.
– Confort: También será necesario disponer de mobiliario para sentarse o recostarse, pero este ha de ser artístico y encajar con el resto del jardín. La mejor elección será los muebles de jardín de madera de gran calidad, pues serán cómodos tanto en verano como en invierno. También ha de tener en cuenta que si vive en una zona de clima muy caluroso ha de disponer de muchas áreas de sombra en el jardín, que pueden ser permanentes, como una amplia pérgola en forma de techo complementada con un ventilador exterior; aunque también puede optar por algo más simple como una sombrilla. Para el invierno se puede instalar una chimenea.
– Plantas: Las plantas que ha de elegir para este jardín han de ser sus favoritas. Elija aquellas especies que le ofrezcan una mayor diversidad de follaje, color y textura de forma que cuando todavía no hayan florecido el jardín tenga un aspecto vistoso. El color verde es el mejor para absorber la luz y eliminar el resplandor de las superficies brillantes. Especies como el Acer palmatum Dissectum Atropurpureum son especialmente adecuadas para este tipo de jardín.
En lo que respecta a las flores, se trata de una elección muy personal. Puede seleccionar aquellas que tienen un aroma intenso, como: la Daphne, la rosa, la gardenia, la Brugmansia candida y la Carissa grandiflora. Estas flores viven mucho tiempo y emiten mucho aroma si se encuentran en lugares cerrados y pequeños. En los climas muy calurosos puede ser más acertado elegir flores de colores fríos como el blanco, el azul, el morado y el rosa, evitando así los rojos, naranjas y amarillos.