El pasillo ha sido entendido desde siempre, aunque erróneamente, como una simple zona de paso hacia otras estancias. Eternamente olvidados y escasamente valorados, se muestran en demasiadas ocasiones como aquel lugar que nos conduce a alguna parte, sin más pretensiones que las que su propio nombre indica. Es demasiado común no tratar a los pasillos, en cuanto a decoración se refiere, como a cualquiera de las demás estancias.
Cabe la posibilidad de integrar este espacio en el resto de la decoración de la vivienda y además es muy conveniente hacerlo. Un pasillo acogedor, correctamente iluminado y bien decorado se convierte en una parte más de la casa, integrándose a la perfección con el resto de nuestro entorno. Pero … ¿cómo hacerlo? He aquí el quid de la cuestión.
PASO AL FONDO
La mayoría de los pasillos son demasiado estrechos y excesivamente largos. Aumentar la sensación de espacio en este tipo de pasillos es relativamente fácil. El color es una de las soluciones. Pinturas, telas y papel pintado son los materiales más idóneos para conseguirlo.
Si elegimos papel nos decantaremos por rayas verticales en tonos suaves. Las rayas verticales consiguen acortar ópticamente el espacio al tiempo que hacen parecer los espacios más altos. Es conveniente que usemos colores neutros: cremas, beiges, azules suaves…
ACORTAR UN PASILLO
Una solución tan sencilla como efectiva es colocar al fondo de un largo pasillo un cuadro de grandes dimensiones, un mueble, una escultura o cualquier otro elemento que rompa la continuidad del pasillo…
UNA GALERÍA DE ARTE
Muy sencilla al tiempo que espectacular es la idea de convertir nuestro estrecho pasillo en una galería de obras de arte. Láminas o grabados encuentran un estupendo lugar en el pasillo. Quizá un espacio al fondo te permita poner una bonita escultura. El resto lo hará una buena iluminación que será el toque de gracia a nuestra particular exposición.
CON VENTANAS
Si tu pasillo, por suerte, dispone de alguna ventana, no dudes en hacer cortineros en el falso techo de escayola rematados con sus correspondientes molduras. Unas buenas cortinas, con estilo, acordes con los colores imperantes en el pasillo darán un toque muy especial a esta zona de paso. Algún mueble o consola de poco fondo completará la decoración sin ocupar demasiado espacio.
ELIMINANDO TABIQUES
Parte de las paredes que conforman nuestro pasillo pueden convertirse en puertas correderas que se integren en la decoración del corredor y que una vez abiertas dejen paso a otras estancias que se integran perfectamente en él. Un simple sistema de tableros deslizantes a través de rieles nos permite conseguir este efecto. El truco consiste en revestir el pasillo con el mismo material que empleemos para realizar las puertas.
LUZ A RAUDALES
Si tu pasillo dispone de gran cantidad de luz natural aprovéchala, es muy posible que esa luz pueda dar vida a otra estancia que carece de ventanas. No dudes pues, en abrir huecos hacia el pasillo en las habitaciones que no dispongan de luz propia. Puede ser un tabique de cristal translúcido, un espectacular vitral o sencillamente ladrillos de cristal pavés. Aparte de su indudable función decorativa cara al pasillo, habrás solucionado otro problema. Hágase la luz
ARMARIOS POR DOQUIER
Si la anchura del pasillo lo permite… ¡ni te lo pienses! Coloca armarios empotrados para guardar las prendas de abrigo, los zapatos, los útiles del camping o de la playa… Ya sabes, todas esas cosas que nunca sabemos muy bien dónde guardar.