Buscadores de la verdad [12-04-2020]
Últimamente, a poco que uno indague y se fije en multitud de artículos, entrevistas y noticias que orbitan alrededor de otras más mediáticas por su corte político, económico, sanitario, de dolorosa actualidad, parece que hay otras de diferente contenido en cuanto a la necesidad de reconectar con la Naturaleza, a la necesidad de restablecer el vinculo de los humanos con la Madre Tierra, a la necesidad del renacer de la espiritualidad. Y no hablo de iluminados o maestros espirituales o psicólogos emocionales o positivistas, que también, sino que se extienden a filósofos, científicos, antropólogos, etc.
Perdidos como andábamos, sobre todo en occidente, en el pragmatismo socioeconómico, en el consumismo patológico, en la competencia extrema por el nicho social, en el lo quiero ahora y ya, en el no puedo parar, en el hace tiempo que perdí la fe…habíamos acabado bebiendo sin sed, comiendo sin hambre, corriendo sin sentido, hablando sin decir, amando sin amar. Comenzamos a darnos cuenta de que lo que no se toma en cuenta, nos viene como destino. Comienza a cobrar importancia “escuchar” a la conciencia planetaria, a lo que nos dicen los acontecimientos, que han demostrado que a pesar de nuestra creencia supremacista como especie, no estábamos preparados, a pesar de todo nuestro “gran poder” unos microscópicos adiestradores nos han arrinconado y castigado en cuestión de meses, aplacando nuestra soberbia de seres supremos, asomándonos al abismo del caos. Y eso no nos gusta, a nuestras mentes les encanta categorizar, poner etiquetas, organizar todas las cosas de acuerdo a criterios dados, pero la vida es un diseño intrincado de proporciones infinitas que no podemos acotar tan fácilmente. Quizá no sea tan necesario más poder intelectual, como si necesitemos más poder espiritual, a lo mejor no necesitamos más de lo que se ve y sí más cosas de las que no se ven. Quizá deberiamos dudar, como decía Descartes, al menos una vez, en la medida de lo posible, de todas las cosas para poder ser buscadores de la verdad. Tal vez no hagan falta más templos, ni filosofías complicadas, tan solo necesitemos nuestro cerebro y nuestro corazón para ejercer de templos, y a la bondad, la comprensión y la consciencia como nuestra filosofía básica. Probablemente haya llegado el momento de cerrar los ojos para ver, de bucear en nuestro interior como individuos, pero también como civilización.
Muchas vivencias personales pueden ponernos en el camino de esa búsqueda, de ese despertar de la espiritualidad, pero los acontecimientos globales, intensos y críticos que vivimos ahora creo que producen más despertares de los que contemplan los escépticos y seguramente menos de los que querrían los más optimistas. Pero aún así, si nos quedamos en el termino medio, creo que se producen más despertares a la consciencia de lo que pudiera parecer. Y quizá no tengan el poder de transmisión del virus, su velocidad de contagio, pero se están produciendo, esos despertares ya son imparables, las grandes preguntas vuelven a ser lanzadas y conviene recordar que son las preguntas las que verdaderamente iluminan, no las respuestas en sí.
Ha llegado la hora de respetar a Gaia, de resintonizarnos y reconciliarnos con Ella, de ser capaces de autorregular nuestro impacto sobre el medio, de que por primera vez La Tierra se adapte a nuevas realidades, y lo hará, pero esperemos que de acuerdo con nosotros como especie, en una singular actualización del sistema operativo planetario para crear lo que han llamado algunos investigadores, “Gaia 2.0”.
Buen día a tod@s!!!
Os quiero Bandid@s!!!
“Conocer a los otros es sabiduría. Conocerte a ti mismo es iluminación.” Lao Tse
Os dejo una canción de Mago de Oz, “Gaia”, una reflexión, un arrepentimiento, un rezo o una plegaria con estética de opera rock a lo Jesucristo Superstar, pero en su línea un tanto a lo Jethro Tull, espero que la disfrutéis.