La mayoría de las personas que han dejado una relación, con el tiempo se arrepienten de cómo lo hicieron, no de haberlo hecho.
Las parejas se rompen por diversos motivos: los años, el desamor, una tercera persona, etc. ¿De quién es la culpa? Empezamos mal, no debe haber culpabilidad cuando se decide romper una relación, sino responsabilidad.
Responsabilidad de hacerlo bien si hay hijos de por medio, responsabilidad de no dañar más de lo necesario al compañero o compañera, responsabilidad de tomar la decisión y saber explicarla. La mayoría de las personas que han dejado una relación, con el tiempo se arrepienten de cómo lo hicieron, no de haberlo hecho.
Seguramente es más difícil asumir la responsabilidad de tomar esa decisión, que sentir culpabilidad y machacarnos por el daño cometido a esa “persona que has tenido a tu lado, que nada ha hecho y no se lo merece”.
Puede sonar duro, pero esa persona también ha de asumir su responsabilidad, porque nadie la obligó a empezar esa relación, porque forma parte de la vida crear vínculos fuertes con alguien pero también que estos se puedan romper, porque nadie puede asumir la culpa de tu infelicidad por una ruptura, como nadie puede asumir que seas fuente de su felicidad o desdicha, es una carga demasiado pesada en cualquier caso.
Si tomaste la decisión consciente de emparejarte, tener hijos con esa persona, etc., en el momento de la ruptura también has de tomar la decisión de responsabilizarte sobreponiéndote lo antes posible de ello, de no dramatizar, ponerte las pilas para estar bien… Culpabilizar a la otra persona de todos tus males no te va a ayudar, solo harás que ese proceso ocurra de manera más lenta y con mas dolor de el necesario para todas las partes implicadas.
Si te dejan… tienes derecho a estar mal, a que la pena se apodere de ti en los primeros momentos, de darte el tiempo de sacudirte y patalear por lo ocurrido, pero no te dejes llevar por ello más de lo necesario, y sobre todo evita culpabilidades, acabarás sufriendo y haciendo sufrir más de lo necesario.
Si dejas…. no dejes que la culpa se apodere de ti, asume con responsabilidad tu decisión, debes entender el sufrimiento ajeno pero no llegues a que te perjudique de tal manera que te limite a tomar decisiones importantes para tu vida, o elijas ser infeliz tú, por no hacer daño al otro.