SALUD: CEREBRO Y SISTEMA NERVIOSO
El sistema nervioso comprende el cerebro, la médula y el conjunto de todos los nervios organismo, y se considera dividido en dos partes: el sistema nervioso central y el sistema nervioso periférico. El central estaría compuesto por el cerebro y la médula espinal y el periférico sería una red nerviosa que serviría de enlace entre el cerebro y la médula espinal y el resto del organismo.
El cerebro sería una especie de ordenador central que controla todas las funciones del organismo, y el resto del sistema nervioso sería una red que envía mensajes en ambos sentidos entre el cerebro y las distintas partes del cuerpo. Esto lo hace a través de la médula espinal, la cual, partiendo del cerebro, desciende por la espalda y contiene nervios en su interior, que se ramifican a lo largo de todo el cuerpo.
Las funciones del cerebro son tan admirables como misteriosas, en el cerebro se producen los pensamientos, las creencias, los recuerdos, el comportamientos y el estado de ánimo. Es la sede de la inteligencia y el centro de control del organismo, coordina las facultades del movimiento, del tacto, el olfato, el oído y la vista. Permite la formación del lenguaje, entender y realizar operaciones numéricas, apreciar la música, visualizar y entender formas geométricas, comunicarnos con los demás.
El cerebro incluso está dotado para la capacidad de planificar con anticipación y crear fantasías. Y millones de cosas más. La capacidad del cerebro humano es única, pero tanta sofisticación tiene un precio: por un lado el cerebro necesita una alimentación constante, con una demanda de flujo sanguíneo y oxígeno muy elevada y continua.
Por otra parte una insuficiencia circulatoria que dure más de 10 segundos, podría causar una pérdida de consciencia. Pero afortunadamente, el cerebro tiene muchos mecanismos de defensa, que hacen que estos y otros problemas se puedan evitar.
El funcionamiento básico del cerebro depende en gran medida de unas células específicas del sistema nervioso llamadas neuronas. Contiene millones de estas células, especializadas en muchos tipos de funciones.
En el momento de nuestro nacimiento el cerebro contiene el número máximo de estas células que tendremos en nuestra vida, pero muchas de ellas aún no están conectadas entre sí, lo que permitirá que a medida que crecemos y aprendemos la información se transmite de neurona en neurona una y otra vez, creando nuevas conexiones o vías nerviosas en el cerebro.
Por eso el momento en el que aprendemos a montar en bici, requiere mucha atención, pero más tarde se automatiza y no requiere ni mucho menos la atención inicial: la conexión ya está establecida, este es el fenómeno de la plasticidad cerebral.