En los últimos años hemos venido conociendo que el sol puede ser realmente perjudicial para nuestra salud, si no se toman las debidas precauciones. Sin embargo, se ha prestado menos atención al hecho de utilizar los rayos solares como una auténtica terapia para la cura de determinadas dolencias y enfermedades. Se trata de utilizar el sol como medio terapéutico, más conocido como helioterapia.
Todos los expertos y médicos están de acuerdo en los importantes y notables beneficios que tienen las radiaciones solares sobre nuestro organismo: sobre la piel, en el metabolismo y sobre las funciones orgánicas y físicas. La helioterapia supone un método muy eficaz para conseguir estas mejoras, siendo preferible practicarla en zonas costeras, ya que el mar ejerce una acción neutralizadora de los rayos.
Esta terapia natural consiste en tratar diversas enfermedades mediante la exposición de la totalidad o una parte del cuerpo a los rayos solares, es decir, lo conocido comúnmente como baños de sol. Suele estar combinada con extractos de plantas para conseguir mejores y más eficaces resultados, siempre bajo un estricto control y supervisión médica, ya que la exposición no controlada a los rayos ultravioletas, pueden provocar daños severos en nuestro cuerpo.
Aplicación sencilla
La forma más habitual de aplicación de la helioterapia es la exposición progresiva al sol, durante varias sesiones controladas, que al principio durarán un breve período de tiempo, aumentando paulatinamente, pasando de diez minutos hasta una hora.
Además, la superficie del cuerpo expuesta al sol, será cada vez más grande, hasta abarcar al final del tratamiento, toda la superficie corporal.
Enfermedades curables por el sol
Muchas enfermedades pueden ser aliviadas o curadas por la benéfica acción de la helioterapia:
- Es ideal para el tratamiento de enfermedades de la piel: los eczemas o la dermatitis mejoran de forma notable.
- El raquitismo y la osteomalacia son enfermedades que se presentan durante la infancia y que se tratan, de manera preventiva, con una exposición razonable a las radiaciones solares en el ambiente marino.
- Las lesiones ulcerosas, las heridas de mala cicatrización, las cicatrices y los estados de convalecencia de diferentes enfermedades suelen mejorar de forma más rápida durante las sesiones de helioterapia en una zona costera.
- Además, muchos trastornos psicológicos, como neurosis, depresión, ansiedad o insomnio pueden mejorar de manera sustancial durante los baños solares de helioterapia marina.
- Las personas delgadas que les cuesta ganar peso, deberán saber que el sol estimula la secreción gástrica y aumenta el apetito. Por el contrario, para las personas obesas se consigue una disminución de peso, debido a la combustión de grasa.
Otras consideraciones
Es necesario tener en cuenta que los baños solares deberán ser al aire libre, sin interposición de cristales, telas o vestidos, con el fin de permitir que el aire ejerza toda su acción benéfica. Sin embargo, en algunos casos podrán recibirse los rayos solares tras los cristales, si lo que se quiere es moderar la intensidad de la radiación.
El sol, en definitiva, aporta importantes beneficios a nuestro organismo, además de prevenirnos y ayudar a la eliminación de determinadas enfermedades y dolencias, mejorando nuestro estado de salud notablemente.