Es importante aclarar que el destete es un
proceso tan importante y merecedor de cuidados como la lactancia, Un
destete realizado inadecuadamente, puede producir daños emocionales. Este proceso comenzará con la introducción de los sólidos en la dieta y que culminará, según la
O.M.S. a partir de los 2 años, cuando el lactante deje
definitivamente de alimentarse con la leche materna. Durante este
proceso no es necesario utilizar el biberón como elemento de
transición, con la que se tiende a prolongar innecesariamente una
oralidad que debe de culminar con el destete.
Es importante aclarar que el tiempo que nos lleva destetar, es
el que necesita el lactante para adaptarse gradualmente a la nueva
forma de relacionarse con la mamá y también ella con su hijo. Antes, el
amor lo daba a través de “la teta”, ahora se lo demostrará dándole el
alimento sólido con mucha paciencia, creatividad y cariño, alentándolo
en sus logros y avances, Así el niño entiende, que crecer no es dolor y
pérdidas, sino placer y logros y que esto enorgullece a sus padres.
