La recuperación es un proceso gradual. Probablemente su cirujano le
diga que empiece a caminar lo más pronto posible (para prevenir que se
formen coágulos de sangre en sus piernas), pero también le dirá que
evite actividades más estrenuas por dos o cuatro semanas. Se le
retirará cualquier sutura en cinco o diez días, de lo contrario éstas
se disuelven, podrá regresar a trabajar en dos o tres días o en tanto
como dos semanas después de la cirugía. El momento en el que continúe
sus actividades depende del grado de su procedimiento, cómo se sienta y
qué recomiende el doctor.
Aunque la mayor parte de la inflamación o decoloración desaparece en
uno o dos meses después de la cirugía, cierta inflamación podrá
permanecer por seis meses o más. Su cirujano programará visitas de
seguimiento y para ver si son necesarios procedimientos adicionales.
Si siente algún síntoma anormal entre las visitas por ejemplo
hemorragia excesiva o un incremento repentino en el dolor o tiene
cualquier pregunta sobre lo que puede o no hacer, no dude en llamar a
su doctor.