La creatina es una molécula proteica que, unida al fósforo, fofocreatina, se convierte en un compuesto que permite liberar de forma rápida energía. Por eso, se ha convirtiendo en un suplemento energético de gran difusión.
La creatina procede de un aminoácido llamado metil guanidina. El cuerpo la sintetiza en el hígado y los riñones a partir de otros aminoácidos, pero también se puede adquirir directamente a través de la carne y el pescado, donde se encuentra en una proporción de 5 gramos de creatina por cada kilogramo de carne. Una vez metabolizada, la creatina se acumula en los músculos esqueléticos, donde se une a una molécula de fosfato, dando lugar a la fosfocreatina o PCr.
La fosfocreatina es un compuesto que el cuerpo usa como una fuente para obtener energía de una manera inmediata durante la contracción muscular. Por tanto, su concurso es importante en los ejercicios de carácter anaeróbico, es decir, aquellos que son breves pero muy intensos. Los estudios han demostrado que los beneficios de la creatina sobre el rendimiento físico son innegables, especialmente en lo que respecta a los esfuerzos musculares. La creatina – convertida en fosfocreatina – mejora la potencia del ejercicio, especialmente aquellos que se basan en repeticiones de movimientos, reduce la aparición de la fatiga y el tiempo de recuperación, además aumenta la síntesis de las proteínas. Su actuación, además, se potencia si se combina con la ingesta de carbohidratos. Esto se debe a que cuando se ingieren carbohidratos, el páncreas segrega insulina, sustancia que acelera el transporte de la creatina hacia las células musculares.
Por todos estos motivos, desde 1993 se venden en el mercado cápsulas de creatina, que se adquieren como potenciadores energéticos. A pesar de sus efectos beneficiosos, su consumo debe realizarse de manera responsable y cautelosa. Un excesivo consumo de creatina puede provocar náuseas, mareos y trastornos gastrointestinales. Además, incrementa la deshidratación durante el ejercicio y, en pacientes renales crónicos, puede deteriorar la función renal.
