Visita desfortunada a su novia
Este muchacho va a visitar a su novia y le entran tremendas ganas de cagar, como era muy penoso no queria pedir permiso para pasar al baño, la novia y la suegra van para la cocina hacer café y el suegro se va a su habitacion a ver su partido de pelotas, el muchacho aprovecha, se levanta a toda velocidad, agarra un florero, saca las flores y se caga en él. Después vuelve a colocar las flores y lo pone encima de la mesa de centro otra vez.
– Al rato le traen el cafe y el muchacho apenado por la peste a mierda que habia se despide.
– Bueno mi amor, tengo que irme, mañana vuelvo.
– Pero pasa todo un mes y el muchacho no regreso a la casa. El suegro le escribe una carta y le pone.
– Hijo mio, mi hija te perdona, tu suegra te perdona, yo te perdono, pero por favor, escribenos y dinos donde te cagastes que ya no aguantamos mas la peste a mierda.
Un buen muchacho
Tras casi un año de salir con mi novia, el próximo mes me caso!
La madre de mi novia o futura suegra es genial (además de estar terriblemente requetebuena) ella solita se ha ocupado de organizar toda la boda: iglesia, música, fotógrafo, banquete, flores, etc.
Hace poco me llamó y pidió que fuera a su casa para revisar la lista de invitados y anular algunos pues se estaba superando nuestras previsiones.
Cuando llegué, revisamos la lista y la rebajamos justo por debajo de los ciento cincuenta invitados.
Fue entonces cuando me dejó boquiabierto: Se quedó en bloomer y sin ajustador y me dijo que siempre le había resultado un hombre muy atractivo, que dentro de un mes ya sería un hombre casado y que antes de que ello ocurriera, quería tener sexo conmigo.
Entonces se levantó, caminó sensualmente hacia el dormitorio y me susurró que yo sabía donde estaba la puerta de salida si lo que prefería era irme.
Me quedé de pie, inmóvil, aproximadamente unos dos minutos y finalmente decidí que sabía perfectamente qué camino tomar.
Me dirigí corriendo a la puerta, salí a la calle y… ya fuera, apoyándose en el capó de mi coche estaba su marido, mi futuro suegro, sonriente y con una escopeta de dos cañones cargada.
Creo recordar que me explicó que únicamente querían estar seguros de que su querida hija se casaba con el hombre adecuado, honesto y se les ocurrió esta pequeña prueba que yo felizmente había superado con éxito.
Me tomó del hombro, y después me abrazó, me dió un cheque de 500,000 dólares sin que yo pudiera reaccionar ni hablar aún aturdido por las emociones.
Coclusión: Menos mal que fui a buscar los condones al auto, que si los llegaba a tener en los bolsillos, hoy estaría muerto…
La Suegra y sus tres Yernos
Una suegra salió a pasear con uno de sus tres yernos.
Mientras pasaban por el parque, la señora se resbala, cae en el lago y se empieza a ahogar.
Sin dudarlo un momento, el yerno se tira al agua y la rescata.
Al día siguiente, el yerno sale y encuentra un coche último modelo con una nota pegada en el parabrisas:
– “Gracias de parte de tu suegra, que te quiere. “
Una semana después la suegra sale a pasear con su segundo yerno.
Al pasar por el mismo lago, la señora se vuelve a resbalar y cae al agua. De inmediato su segundo yerno se mete al lago y la salva.
Al día siguiente, el segundo yerno encuentra frente a su casa un coche último modelo y una nota que dice:
– “Gracias de parte de tu suegra, que te quiere.”
Una semana más tarde la suegra sale a pasear con su tercer yerno. La historia se repite, y la señora se cae al lago. Pero que esta vez el yerno se sienta en el suelo y se ríe mientras ve a la señora ahogarse y hundirse en el agua.
Al día siguiente, el tercer yerno sale y encuentra un coche último modelo con una nota en el parabrisas:
– “Gracias de parte de tu suegro, que te quiere”.
Cena con los suegros
Era un tipo que iba a ser presentado por su novia a sus suegros con una cena. Estaba absolutamente nervioso y aterrado por la nueva situación que iba a vivir cuando un amigo le dice:
– Te doy tres pastillas que te van a relajar. Actúan reduciendo el temblor, el sudor y favorecen una buena locutoria y comunicación. Eso sí, tómate una, media hora antes de ir. Si justo antes de entrar, ves que aún estás un poco nervioso, tómate la segunda y deja la tercera sólo para un caso extremo de ansiedad cuando ya esté entablado el diálogo con tu suegro.
Llegada la hora de partir el tipo piensa:
– Para qué voy a tomar primero una y después otra, me las tomo todas de golpe y me quedo más seguro.
Llega el memorable momento y el tipo es presentado a sus suegros, se sientan en la mesa servida, y el tipo se levanta de golpe, toma a la novia, la tira encima de la mesa, le arranca la ropa y se la empieza a cepillar de manera brusca ante la mirada atónita de los comensales.
– ¿Pero qué le está haciendo este a mi niña? -Exclama el suegro mirando a su esposa.
En eso estaban cuando el tipo agarra a la suegra, la apoya en la mesa y se la empieza a cepillar por detrás. La caras del suegro y de la abuela, que también estaba allí, eran todo un poema.
Cuando acaba con la suegra, la deja tirada encima de la mesa, agarra al suegro, le rompe la costura posterior del pantalón y se lo empieza a cepillar a él también, ante la mirada atónita de la suegra y la novia que aún estaban exhaustas y sin fuerzas.
La abuela escandalizada empieza a correr por la casa… Mientras el tipo seguía con el suegro, saca el móvil, llama al amigo que le dio las pastillas y le pregunta:
– Loco, ¿Qué me diste? ¡Me estoy cepillando a toda la familia y no puedo parar!!
– ¿Pero te las tomaste como te dije?
– No, me las tomé todas de golpe, creí que iría mejor.
– ¡Animal, corre al frigorífico que seguro que hay leche y poné el miembro en remojo en ella, que actuará como antídoto!!
El pobre deja al suegro exhausto y tirado en la mesa y se va corriendo a la cocina, cruzándose antes con la abuela que aún corría por la casa. Abre la frigorífico, agarra el tetra-brick de leche que estaba abierto y la mete dentro, haciendo al mismo tiempo sonidos de alivio y bienestar, mientras que la abuela lo miraba desde la puerta de la cocina. No pudiendo creer lo que ve y horrorizada, la abuela sale gritando…
– ¡¡¡¡A esconderse Todos, que el hijo de puta la está recargandooooo!!!!
Ensalada
Un chico iba a pasar la noche en casa de su novia. Naturalmente, el padre
de ésta desconfiaba del muchacho, por lo que le dice a su hija:
– “M'ija, ya sabes que no confío en tu novio en lo más mínimo y si intenta
hacerte algo, no dudes en pedir mi ayuda. Si te toca la vagina gritas:
¡Patatas, patatas! Si te toca las tetas gritas: ¡Cebollas, cebollas! Si te lo
mete gritas: ¡Lechugas, lechugas! Si te sodomiza gritas: ¡Zanahorias,
zanahorias! Y si te pide que se lo chupes gritas: ¡Perejiles, perejiles! Y yo
iré corriendo en tu ayuda, ¿está claro, m'ija?”
La chica accede a la petición de su padre y todos se van a dormir. A las 12
de la noche despierta el padre al oir que su hija grita:
– “¡Ensalada, ensalada, ensaladaaaaaaaaa!”
Ejecutivo y Secretaria
Una tarde el ejecutivo de una importante empresa, decide darse un respiro en sus labores, y se va con su hermosa secretaria a un motel para pasar un “merecido” rato de placer, seguro de que su mujer, tan tierna e inocente, no se atrevería ni siquiera a imaginar lo que haría.
Al llegar al motel, encuentra allí parqueado el convertible de su suegro, e inmediatamente piensa: “Mire en lo que anda el viejo sinvergüenza; le voy a jugar una broma, para que no sea tan prostituto.” Acto seguido le quita las copas a las 4 ruedas al convertible, las guarda en el baúl de su carro, y luego se adentra con la secretaria a hacer lo que tenía que hacer, tranquilamente.
Cuando sale, el carro de su suegro ya no está, así que decide irse a su casa para entregarle las copas y terminar la broma.
Al llegar a la casa del suegro, lo saluda como si nada hubiese pasado:
– Hola don Pedrito; ¿como esta…? le noto como contrariado…
– ¡Y como no voy a estar contrariado, con estos hijos míos, tan estúpidos e insensatos!
– Pero, que pasó suegrito, cuénteme… -Dice el yerno apenas pudiendo contener la risa.
– Como te parece que le presto el coche a mi hija, a la idiota de tu mujer, para que vaya a la iglesia, y le roban las 4 copas del carro mientras ella está REZANDO…
Cena con los suegros
Habia una cena donde los suegros, y el man estaba estrenando moto y la pintura aún estaba fresca y si llovia debia untarle a la moto vaselina para que no se despintara…..
Ya en la cena todos comieron y nadie queria lavar los platos, asi que dijeron que el que hablara los tenia que labar.
– Bueno, estaban todos callados y el man coge a la suegra y le hace el amor….Todos seguían callados.
– Luego cogió a la novia y también le hace el amor
– Y Luego a la hermana
Cuando miró por la ventana se dió cuenta de que estaba lloviendo y se mandó la mano al bolsillo y sacó la vaselina….
En ese momento se levanta rápidamente el suegro y dice:
“No…No…No…Yo lavo los platos”
¿Cómo es el Matrimonio?
Había una vez un hombre que se iba a casar y le pregunta al futuro suegro:
– Hey suegro, ¿cómo es el matrimonio?
Y el suegro le dice:
– Mi querido yerno, haber los primeros seis meses son inmamables, los primeros
dos años también.
Y le pregunta el yerno:
– ¿Y los otros años?
– Ah no, es que apenas llevo dos…
Pareja de Novios en el sillón de la sala
Una pareja de novios está en el sillón de la sala acariciándose, besuqueándose y el novio tiene la cremallera abierta y su “cosa” afuera.
Están muy entretenidos, cuando de pronto llega el padre de la novia y el novio no tiene tiempo para guardarse su pieza por lo que decide tirarse en el piso como si estuviera buscando algo debajo del sillón.
– ¿Qué está haciendo?- le preguntó el suegro, intrigado por la extraña posición del muchacho.
– Es que vi un ratón que cruzó por aquí – le dijo el pelado sin dejar de mirar debajo del mueble.
– Pero, ¿lo está buscando para matarlo o para metérselo?
El Novio y el Farmaceútico
Un hombre entra a una droguería y le dice al farmaceuta:
– ¿Me da un condón, por favor? Es que tengo cita con mi novia.
Luego de un rato regresa y dice:
– Señor, ¿me da otro condón? Por si acaso, porque mi cuñada también está muy buena.
Después regresa y pide otro diciendo:
– Por si acaso, porque mi suegra no se queda atrás.
Llega la hora de la cita y la muchacha presenta el novio a sus padres. El novio se pone pálido y le dice en voz baja y entre dientes a su novia:
– ¿Por qué no me dijiste que tu padre era farmaceuta?
Salario y Papel higiénico
Suegrito, vengo a pedir la mano de su hija.
– A ver, ¿cuánto gana usted al mes?
– Cien mil pesitos, suegro.
– ¡Pero si eso no le alcanza a mi hija ni para el papel higiénico!
– Entonces vuelvo cuando se le pase la diarrea.
Hijo de papá y el turco
Un hijo de papi que mete las patas con la hija de un turco. Lo llama el turco y le dice:
– Usted acabó con el honor de la familia y el de mi hija. Tiene que casarse con ella.
– Caray, no puedo casarme con tu hija. Me desheredan. Mejor hagamos un negocio, si es un varón le doy medio millón de dólares, si es niña le doy el millón.
– Y si no es nada, mijo, ¿le da otra oportunidad?
Un Fornido campesino
Un fornido campesino, entradito en los cuarenta (de esos que andan metidos bien dentro el monte) llega a la consulta del médico del pueblo cargando sobre los hombros a otro campesino mucho más joven que él. Lo deposita en la camilla de examen y le dice al galeno:
– Vea cómo le cura la herida en la nalga lo más pronto posible. Le he pegado un balazo con la escopeta, como si se tratara de una liebre, que no sufra, por favor, que se trata de mi yerno.
– Pero, ¿Por qué le ha disparado a su propio yerno?, dice el médico sorprendido.
– Pues, realmente, cuando le pegué el tiro, todavía no era mi yerno.
Petición de Mano. El Árbitro
Un muchacho, tocó a la puerta de la casa de su novia. Tuvo el tino de abrir el Padre de la muchacha-
¿Qué desea, joven?
– Pues verá, vengo a hablar con usted.
– Bueno, pues, pase jóven, vayamos a la sala y ahí me cuenta de qué quiere hablar conmigo.¿Y bien?
El joven, todo decisión, respondió:
– Mire usted, vengo a comunicarle que a su hija y a mí nos gustaría compartir nuestras vidas, nos queremos casar.
El señor sonrió.
– Pues está muy bien eso de que se casen, pero cuénteme, muchacho, ¿ya cuenta con un salario digno para poder sustentar a mi hija y los hijos que vengan?
El joven, con todo el aplomo del mundo, contestó:
– Mire, aunque soy Ingeniero titulado, no gano mucho. Sin embargo, su hija me ha comunicado lo que ganan su distinguida esposa y usted. Por lo cual, confío en tener una pequeña ayuda de ustedes para poder pagar el teléfono, el agua, la luz y el supermercado.
Un poco sorprendido por la respuesta, el Padre hizo otra pregunta:
– Bueno, ¿y piensan comprar un apartamento o una casa? ¿O prefieren alquilar..?
El joven, con mirada inocente, contestó:
– Si antes le pedí una pequeña ayuda para poder ir viviendo, hemos pensado que, como esta casa es muy grande y pueden vivir perfectamente dos matrimonios, no es necesario comprar o alquilar apartamento o casa. Deseamos vivir en esta casa con ustedes.
El señor, desconcertado por la actitud del muchacho, continuó con el interrogatorio: – – Dígame algo, ¿tiene automóvil?
El joven, sonriendo, respondió:
– Mire, no tengo coche porque he estado pensando que si usted tiene tres, para qué vamos a comprar uno más. Usted nos deja el que les sobra y así no es necesario adquirir otro.
En ese instante, entró en la sala la Madre de la novia, quien, mirando primero al joven y luego a su esposo, preguntó cordialmente:
– ¿Se puede saber de qué hablan?
El esposo respondió:
Querida mía, qué bueno que llegas, quiero presentarte al Señor Arbitro, quien pretende ser el futuro marido de nuestra hija.
El joven, desconcertado y molesto, dijo:
Oiga, ¿por qué me llama Señor Arbitro?
A lo que el presunto suegro contestó:
Y bueno, grandísimo hijo de p….., ¿cómo demonios quieres que te llame si hasta ahora lo único que vas a poner en esta casa es el pito
Suegro, Novia Árabe y novio Mexicano
Estaba un mexicano en visita con su novia (nacionalidad árabe) y cuando se va ha retirar su suegro le dice:
– Arbano ten esta manzana. El mexicano en el camino se la come, a los dias, cuando el mexicano regresa a visita le pregunta su suegro: y dime Arbano, que hiciste con la manzana que te di, a lo que el mexicano le contesta: pos, me dió hambre y me la comi en el camino.
El árabe le dice: No hijo en nuestra familia tenemos que aprender a distribuir bien nuestros recursos, nosotros, con la cáscara de esa manzana hacemos té, el fruto lo repartimos entre los 8 integrantes de la familia y con las semillas plantamos mas manzanas.
En fin, pensando el árabe que con esa cátedra el mexicano habia ya entendido, le da al retirarse una tira de chorizo. Al otro dia cuando el mexicano llega de nuevo a la visita, el árabe le vuelve a preguntar lo mismo: Arbano que hiciste con el chorizo que te di, a lo que el mexicano responde: bueno, el chorizo lo guicé, y lo reparté entre todos los de mi barrio, con el fierrito que detiene el plástico le hice un anillo a su hija.
Muy bien, le contesta el árabe, continua.
Con el plástico me hice un condon, que use con su hija y esta lechita que me quedo en él, se la guarde para que se haga un capuchino…
Joven y petición de mano
Llega un joven a pedir la mano de su novia y dice:
– Buenos dias suegro, buenos dias suegra, buenos dias Lupita. Vengo a pedir la mano de su hija.
Y el suegro le pregunta:
– ¿Con cuánto cuenta?
Y el responde con cien mil pesos y el suegro dice: – Noooo, eso no alcanza ni pal papel higiènico.
El novio dice:
– Bueno. Ta luego suegro, ta luego suegra, ta luego Lupita.
Vuelve a los tres meses.
– Buenos dias suegro, buenos dias suegra, buenos dias Lupita. Vengo a pedir la mano de su hija.
Y el suegro le pregunta:
– ¿Con cuánto cuenta?
– Con Trescientos mil pesos.
Y el suegro responde:
– Nooooo, eso no alcanza ni pal papel higiènico.
A lo que el joven contesta:
– Ta luego suegro, ta luego suegra, ta luego Lupita cagona…
Suegro Banquero
A un importante banquero se le presenta el pretendiente a pedir la mano de su hija y le dice:
– Yo amo a su hija y no me importa que no tuviera un centavo…
– ¿Eso es cierto?- le responde el banquero.
El pretendiente responde:
– Se lo juro.
Le vuelve a preguntar el banquero:
– ¿Esta bien seguro?
El responde:
– Sí, señor estoy bien seguro.
– Jaime- Dice el banquero dirigiéndose al mayordomo.
Y luego continúa:
-Acompaña a ese señor a la puerta, no quiero idiotas en mi familia.
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