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La
suave brisa primaveral vuelve a acariciar tu rostro, matizando sus
rasgos con la luminosidad, el descaro y la energía de los tonos y
texturas más llamativas y actuales. Colores incisivos, penetrantes y
desgarradores pactan con tu mirada, pómulos y labios…

Estridentes
naranjas, rojos infernales y azules electrizantes realzan tu faz con
una extraordinaria fuerza. Permite que las olas del mar refresquen tu
espléndido semblante y matiza tu belleza natural como prefieras.

Desprenderás
atractivo, encanto, gracia y seducción…

@ Las
posibilidades de tu rostro…

… son infinitas. ¡Sácales todo el partido! Permite a doña
Travesura que haga de las suyas. El resultado te sorprenderá. Maquíllate
pero, ante todo, juega y diviértete.

@ La
base del maquillaje

Aparta de tu mente los tonos oscuros que apagan tu belleza. Con la
llegada de la primavera, la luz se convierte en la protagonista en
todos los campos. Dale la importancia que merece y permite que tu
rostro respire aplicándote una base mucho más tenue y ligera que
resalte tus pómulos y mentón. La gama de colores que se
encuentra actualmente en la cresta de la ola es aquella que va de
los tonos ocre a los rosados, pasando por los levemente
anaranjados.

@ El
prodigioso efecto de los polvos…

…hará aparecer, después de pronunciar las palabras mágicas,
unos pómulos de película. El conocido colorete regresa impregnándote
de un imperceptible resplandor purpúreo. La gama de tonos en que
aparecen te sorprenderá muy gratamente. Azul, cereza, blanco, nácar,
melocotón… Todos los matices de color de la naturaleza se reúnen
en tu cándido rostro.

@ Labios
y tentación…

Por un beso tuyo… ¡Ay lo que darían por un beso tuyo!… Las
barras de labios de la nueva temporada conjugan a la perfección
aspectos tan importantes como textura, brillo, hidratación,
volumen, color y permanencia. Maquilla tus labios de fantasía con
tonos como rosa ácido, marrón oscuro, azul o incluso negro.

@ Miradas
que hipnotizan

Mírame fijamente a los ojos… y caerás preso de mi voluntad.
Traza una doble línea estudiadamente descuidada sobre tus párpados
en tonos que reflejen un gran contraste, como por ejemplo fucsia y
blanco. Extiende la sombra de ojos hasta que alcance el final de
tus cejas. Hazte a continuación con un lápiz delineador y dibuja
una delgada línea negra en el párpado inferior para estilizar y
alargar su forma.

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