Todas las mujeres queremos tener la piel suave y tersa, para
ello, nada mejor que preparar nuestros propios productos naturales a base de yogur, jugo
de frutas, miel o leche. ¡Anímate a probarlas!
Todas sabemos que la piel
necesita vitaminas, como la A, que refresca la piel cansada y la E, que regula y regenera
su humectación natural- más las proteínas que la protegen de la sequedad y
deshidratación. Hoy te explicamos cómo preparar sus propias cremas humectantes y
nutritivas
Una suave limpieza
facial.
Es el primer paso para que
el cutis luzca sano y terso. En lugar de la clásica crema de limpieza, puede preparar en
casa estas naturales y efectivas recetas que eliminan impurezas.
Leche de girasol.
Para pieles normales, lo
mejor será que mezclemos en una taza de leche entera con tres gotas de aceite de girasol.
Es un excelente desmaquillante. Aplícalo con un algodón, y retira el excedente, luego
enjuaga los restos de leche y aceite que hayan quedado.
Leche de manzanilla
y diente de león.
Para pieles pálidas y de
poros grandes. Echar agua hirviendo (140ml) sobre tres cucharadas de manzanilla y dos
cucharadas de hojas de diente de león. Mezclar bien y dejar macerar durante 12 horas.
Después añadir 140 ml de leche y dejar reposar otras dos horas, colar y echar en un
frasco. Aplicar con algodones por la mañana y la noche.
Leche de
Manzanilla.
Para pieles secas. Mezclar
dos cucharadas de leche fresca con otras dos de agua de manzanilla. Aplicar con algodón o
un lienzo limpio embebido en la preparación.
Emulsión
limpiadora de yogur y miel.
Indicada para todos los
tipos de piel. Poner en una cacerola o sartén de teflón 150 ml de yogur y 3 cucharadas
de miel y calentar suavemente, removiendo sin parar. Dejar reposar 5 horas, echar la
mezcla en un tarro y ponerlo en la heladera. Esta emulsión limpia profundamente y suaviza
la piel.
Máscaras de
belleza nocturnas.
Por la mañana y la noche
en unos pocos minutos y con simples pasos, se pueden mejorar la elasticidad y humectación
cutáneas. Recuerda que son preparaciones que al no contener aditivos ni conservantes
deben poseer un tiempo breve de mantenimiento.
Crema básica para
cualquier tipo de piel.
Mezclar 3 cucharadas de o
yogur, media cucharada de aceite de palta y un poco de esencia natural de vainilla.
Conservar la mezcla en la nevera.
Crema de yogur
diurna (para pieles difíciles y porosas).
Mezclar una cucharada de
yogur con otra de una crema facial y aplicarla masajeando levemente la piel de la cara.
Aplicarla sobre el rostro, cuello y escote. Conservar en la nevera no más de 7 días.
Cremas de yogur
nocturnas (Para pieles grasas)
Tres cucharadas de yogur,
una yema, una cucharada de ricota, media cucharada de vinagre de manzana y otra de jugo de
tomate mezclarlo todo y añadir una cucharada de miel caliente, Poner la crema por la
noche, después de limpiar la piel. Relaja el cutis, eliminan impurezas y suprime el
brillo producto del exceso de oleosidad. Se conserva bien durante dos días.
Mascarillas
regeneradoras.
Bananas y ricota .
Para piel seca: 1 banana
madura, una cucharada de nata y un poco de aceite de jojoba. Mezclar bien y aplicar
durante diez minutos.
Manzanilla y leche.
Para todo tipo de pieles.
Poner un puñado de flores de manzanilla de 75 ml de leche tibia, tapar y dejar veinte
minutos. Después calentar, añadir una cucharada de salvado y unas gotas de miel.
Miel y ricota.
Para pieles grasas. Batir
una cucharada de ricota con la mitad de la miel y una cantidad igual de jugo de limón y
aplicar.
Romero y leche.
Para pieles porosas, una
cucharada de agua de romero con otra de leche. Mezclar bien y aplicar con compresas sobre
el rostro.
Limón y coñac.
Para pieles pálidas y
descoloridas. Mezclar una taza de leche con una cucharada de jugo de limón y otro tanto
de coñac. Calentar a baño de María y mantener en la piel durante diez minutos.