En perfumería se utilizan distintos sistemas para obtener los aceites esenciales de las
plantas. Los más importantes:
Destilación. Se pueden tratar maderas, raíces, flores
y hojas. Las sustancias olorosas se arrastran mediante vapor de agua y en forma de vapor.
Al tener ambas distinta densidad, se separan fácilmente.
Exudación. Consiste en practicar pequeñas incisiones en los
troncos de los arboles y arbustos que proporcionan resinas olorosas, Así se obtiene el
incienso, el benjuí y los distintos bálsamos.
Expresión. Para obtener el aceite esencial de los cítricos, se
comprimen las cascaras de los frutos una vez extraiga la pulpa. Al oprimir la cascar,
estallan las pequeñas bolsitas de esencia que contienen.
Extracción por disolventes
volátiles. Se trata de poner
en maceración la parte de la planta de la que se va a extraer el aceite esencial. La
esencia se disuelve y se elimina el disolvente por evaporación. Mediante esta técnica se
obtiene de las flores el concreto, y de bálsamos, resinas y gomas, los resinoides. Una
vez lavados con alcohol para limpiar las ceras y resinas se obtiene el absoluto, la
materia prima aromaticé mas concentrada.