Los masajes son muy importantes a tener en cuenta los cuidados de los
pies. Masajear los pies todas las noches evita la formación de durezas
y es muy relajante. Para conseguir una mayor efectividad se recomienda
utilizar una crema hidratante de cuerpo o manos o un aceite aromático.
Los masajes consisten en estirar los dedos y realizar movimientos
verticales de delante hacia atrás para agilizarlos.
Sujetando el pie con las dos manos, coloque los pulgares sobre
la parte carnosa del pie y describa movimientos circulares. Baje los
dedos de los pies y levántelos articulación por articulación. Después
describa círculos con el dedo grande del pie en un sentido y luego en
otro.
Por último se masajean los pies desde los dedos hacia
el talón, subiendo en dirección hacia la pantorrilla. En caso de
encontrar un punto doloroso, se debe insistir en esa zona hasta que
desaparezca el dolor.