A muchos adolescentes de padres divorciados les preocupa que puedan
verse afectados los planes para su futuro. Algunos temen que el costo
del divorcio (los honorarios de abogados y los gastos de dos hogares)
suponga una pérdida del poder adquisitivo y les impida ir a la
universidad o realizar otras actividades.
Escoge un buen momento para hablar con tus padres sobre lo que te
preocupa; cuando dispongan de suficiente tiempo para sentarse, con uno
de ellos o con ambos, a fin de comentar como te afectará el divorcio.
No te preocupes por sumar otra fuente de estrés para tus padres. Es
mejor que hables de tus preocupaciones en vez de guardártelas y dejar
que se acumulen el miedo o el resentimiento. La mayoría de los
problemas tienen solución y existen psicólogos y terapeutas que pueden
ayudar a los adolescentes y a sus padres a encontrar esas soluciones.