Una vez que ya hemos decidido probar, es importante saber cómo cuidar el nuevo look, y para eso hay que ser constantes y conscientes de que el cabello teñido requiere un cuidado diario en el que no deben faltar las proteínas y los protectores solares.
Utilizar un champú nutritivo a base de determinadas proteínas que el cabello va perdiendo con la exposición al sol, al agua de mar, o al cloro. La función de ese champú es mantener el equilibrio y poder neutralizar la acción agresiva de esos agentes externos.
Ocupar protectores, ya sea en spray o gel, de la línea solar. Protegen al cabello de la agresión de agentes como el sol, mar o cloro.
Aplicar diferentes hidratantes dependiendo de las necesidades de cada cabello.
Esta rutina debe ser diaria.
Aprovechar de no ocupar en verano el secador de pelo, porque la agresión del ambiente ya es bastante fuerte, como para agredir aun más el cabello con el calor del secador.
Tomar mucha agua.
Tener en cuenta que los tintes rojos pierde más color con el sol, y que los rubios si bien ganan con él, pierden con el cloro de las piscinas porque puede ponerse verdoso.
Para evitar que el color se vaya oxidando, es bueno también ocupar champúes con pigmentos que fortalezcan el reflejo del color.
Hoy tenemos una gama de líneas increíbles para cuidado del cabello, de tintura, de todo, y los laboratorios están constantemente modernizando las tecnologías para cuidar un poco más la fibra capilar.
Es muy difícil que el cabello se estropee en tratamientos como el teñido, salvo que sea algo tan agresivo como una decoloración, en la que obviamente se va quitando pigmento y por lógica se sensibiliza el cabello.
Fuera de eso, hay tratamientos como champúes muy buenos que son específicos para los pelos teñidos y tratamientos de hidratación.