La autoestima se define como los sentimientos que una
persona tiene sobre sí misma y está determinada
por la respuesta a la pregunta “¿Hasta qué
punto me agrada lo que soy?”.
En la adolescencia
es frecuente que se produzca una disminución
de la autoestima debida a la creciente manifestación
de los cambios que se producen, los pensamientos que
surgen y la forma diferente de pensar acerca de las
cosas.
En este periodo, los adolescentes se vuelven
más reflexivos sobre quiénes son y quiénes
desean ser y observan las diferencias entre el modo
en que actúan y el modo en que piensan que deberían
hacerlo.
Una vez que comienzan a reflexionar sobre sus
acciones y características, se ven confrontados
con la percepción que tienen de sí mismos.
Fijémonos en las chicas adolescentes que suelen
dar más importancia al hecho de sentirse atractivas
y, si no lo logran, su autoestima disminuye.