Para determinar si un tumor es primario o metastático, un patólogo
examina una muestra del tumor al microscopio. Por lo general, las
células cancerosas se ven como versiones anormales de las células en el
tejido donde se inició el cáncer. Tras la realización de pruebas
diagnósticas especializadas, un patólogo casi siempre puede detectar el
origen de las células cancerosas. Los marcadores o antígenos que se
encuentran en las células cancerosas o sobre ellas pueden indicar el
sitio primario del cáncer.
Los cánceres metastáticos se
pueden encontrar antes o al mismo tiempo que se encuentra el tumor
primario, o hasta meses o años después. Cuando se encuentra un tumor
nuevo en un paciente que se ha sometido a tratamiento para el cáncer en
el pasado, casi siempre es metástasis y no un tumor primario.