En sus primeros días de vida, la
actividad principal del bebé es dormir, y cuando despierta sólo lo hace para
alimentarse o para el cambio de pañal.
Al principio los bebés suelen dormir
de 2 a 4
horas seguidas. Durante los primeros meses los niños duermen de 12 a 20 horas al día, y no
distinguen entre el día y la noche.