A medida que envejecemos cambian nuestros
patrones de sueño.
Las personas mayores requieren menos
tiempo para dormir.
También necesitan más tiempo
para caer dormidos, y despiertan frecuentemente durante la noche.
Es importante tener un horario para descansos.
Dormir un poco
durante el día puede refrescar y revitalizar al paciente.
Sin embargo, si nota que el paciente duerme muy poco durante la
noche, esto podría indicar un problema.
Notifique al
médico y discútalo.