Ya está aprendiendo mucho del mundo exterior y comienza a darse cuenta que la noche es para dormir y que le es posible quedarse dormido por su cuenta.
Ahora es el momento para empezar a establecer un régimen de siestas y para la hora de ir a dormir.
La rutina es muy importante para tu bebé de cuatro meses. Por lo tanto, trata de asegurarte de que la hora de acostarte y las siestas ocurran en el mismo horario y de la misma forma todos los días. No debes ser estricta, sino lo más constante posible.