Problemas menores:
Infecciones. Si la molestia inicial continúa después de la cicatrización, hay que consultar a un dermatólogo.
Alergias. En forma de eccema de contacto, la piel se inflama, produce vesículas, exuda y pica, no desaparece hasta eliminar el causante.
Hay casos de alergia a los colorantes (tatuaje) o a los metales y demás materiales utilizados:
El sulfato rojo de mercurio se utiliza como pigmento rojo en tatuajes y en pinturas artísticas.
Metales Níquel, Cromo (Dicromato potásico) en tatuajes verdes, Cadmio (Amarillo)
Sales de cobalto en tatuajes azules.
Oxido de hierro, tonos ocres.
Cuidado con los colores blanco y beige!, llevan en su composición Oxido de Titanio y Oxido de Zinc.
Otros pigmentos orgánicos, azoicos y derivados de plantas dan alergia en ciertas personas.
Problemas mayores:
Si el material utilizado por el tatuador no es estéril y de un solo uso, existe peligro de contraer enfermedades infecciosas. Se destaca que también es posible que se trasmita el virus de la Hepatitis B y C, además de otras enfermedades infecciosas, si el material usado no está esterilizado.
Se desaconsejan los tatuajes y el piercing a las personas afectas de diabetes, insuficiencia renal o enfermedades cardíacas congénitas: una eventual reacción alérgica sería peligrosa.
Otras complicaciones:
Infección.
Dispersión de pigmentos (migraciones).
Defectos de técnica.