Existen numerosas reacciones adversas que pueden producirse por el consumo de determinados individuos.
Una reacción adversa es una reacción clínica anormal producida por el consumo de alimentos. Esta puede ser de dos tipos:
presentes en los alimentos. No afectan a individuos concretos,
sensibles, sino a cualquier individuo que este expuesto al tóxico.
Alergias: Las
alergias se producen en individuos que presentan una hipersensibilidad
a determinados alimentos o componentes de los mismos. Al entrar en
contacto con ese alimento, el individuo reacciona contra él del mismo
modo que lo haría frente a un microorganismo patógeno, ya que su
organismo lo detecta como algo nocivo e intenta eliminarlo. Hay que
decir que para que se produzca una reacción alérgica, el individuo debe
haber estado expuesto al menos dos veces al mismo componente
alimentario. En el primer contacto, el organismo de ese individuo, y
más concretamente su sistema inmune, detecta su presencia y se “da
cuenta” de que es algo peligroso para el y por tanto debe ser
destruido. Pero en este primer contacto el sistema inmune solo toma
nota del peligro, en este momento el sistema inmune no ataca. Es
necesario un segundo contacto, el cual alerte al sistema inmune que el
“intruso” ha vuelto a entrar en el organismo, entonces como este
sistema ya tenía conciencia de él intenta destruirlo a través de una
serie de mecanismos que desencadena la sintomatología que el individuo
manifestará.
Intolerancias: Estas, a diferencia de las alergias ,
no es necesario que se de un segundo contacto, desde el primer momento
existe una alteración en el individuo ya que éste carece de ciertas
enzimas necesarias para la degradación del alimento. Un ejemplo muy
típico es el de la intolerancia que ciertos niños tienen a la lactosa
ya que estos niños no tiene lactasas, que son unas enzimas necesarias
para que la lactosa se degrade a otros componentes de menor tamaño y
puedan ser absorbidos y aprovechados por el niño.También las
intolerancias se producen ante determinados fármacos por el mismo
motivo. El individuo no puede degradarlo porque le faltan las enzimas
necesarias para ello y por ello se producen las alteraciones.
Hay
que decir que la incidencia de las alergias es menor que la de las
intolerancias y que muchas veces las alergias son de tipo psicógeno, es
decir ,el individuo se cree que es alérgico ha algo y realmente no lo
es, por ello ante una reacción anómala al tomar alientos es mejor
acudir al médico y que el determine los pasos que debemos de seguir.
Las alergias son más frecuentes en los niños, y tienden a desaparecer con la edad, a medida que el individuo va madurando. Muchos
alergenos surgen tras el tratamiento de los alimentos, pero otros
alergenos se destruyen durante el tratamiento. Son procesos poco
conocidos, y muchos de ellos no son de tipo alimentario.