El
fluoruro de hidrógeno es un líquido o gas incoloro, dependiendo de la
temperatura, con un olor penetrante e irritante, corrosivo y tóxico.
El fluoruro de hidrógeno se emplea comúnmente como catalizador en un
gran número de industrias, especialmente en la industria del petróleo,
aluminio, plásticos y colorantes, así como en la fabricación y gravado
del vidrio.
Los
efectos observados en seres humanos, tanto en exposiciones controladas
como accidentales, van desde hemorragias nasales e irritaciones
respiratorias y oculares a bajas concentracione, hasta quemaduras de
segundo y tercer grado y, en algunos casos la muerte.