La
exploración física al principio puede orientar hacia la
enfermedad, pero el diagnóstico definitivo se realiza mediante
la radiografía.
El tratamiento se dirige a reducir la carga sobre la cadera afecta para favorecer su curación rápida y correcta.
En contadas ocasiones se debe recurrir a la cirugía.
Reposo. No caminar sobre la pierna afectada.
Inmovilización de la pierna.