Es muy común que tu hijo o tu hija te haga esta propuesta cuando sus necesidades e intereses dejan de ser los juguetes y los dibujos animados. En el momento en que llegan a una cierta edad, contar con un poco de independencia económica para hacer frente a sus gastos es muy importante tanto para ellos como para ellas.
Si te ha llegado el momento, debes escucharle con mucha atención y averiguar qué motivos son los que realmente le han llevado a querer buscar un trabajo. No pongas el grito en el cielo y aprende a respetar sus decisiones. Por mucho que te empeñes, ya ha dejado de ser tu pequeño/a…
Puede ser positivo
Piensa que en el mismo momento en que tu hijo/a te plantea este tema, está demostrando su madurez y un gran sentido de la responsabilidad. El primer trabajo, además, puede aportarle una serie de experiencias muy beneficiosas que le orientarán a la hora de enfrentarse al futuro. Tanto en el ámbito personal como en el laboral, la disciplina y el compromiso adoptados son factores que determinarán su carácter y su forma de actuar.
Si quieres ser justa y no imponer tu decisión por encima de la suya, procura no cegarte y actúa teniendo en cuenta lo importante que es:
- escuchar sus razones y saber diferenciar entre un simple capricho y una firme voluntad de cumplir con las obligaciones derivadas de un puesto de trabajo
- si realmente te convence, oriéntale sobre las tareas que puede realizar y el número de horas que es conveniente que le dedique para que el trabajo no influya en sus estudios. Las vacaciones y los fines de semana son los periodos de tiempo que más adecuados para trabajar
- no es conveniente que busque trabajos que requieran una gran responsabilidad y conocimientos. Piensa que lo mejor para su edad es realizar actividades sencillas relacionadas con su entorno. Puede empezar por pasear perros, cuidar jardines, organizar fiestas infantiles e incluso dar clases a niños y niñas que estudien niveles inferiores. Esto último le servirá tanto para ganar algún dinero como para repasar contenidos escolares que ya ha superado.
- para que tu hijo o hija “se entrene” en este campo que es tan nuevo, puedes ayudarle dejando que sus primeros pinitos los realice en casa. Puedes encargarle tareas y darle una gratificación por ello. De esta manera aprenderá el valor de las palabras compromiso y responsabilidad
- si ya ha cumplido los 16, recuerda que es mucho mejor que esté respaldado por un contrato laboral a la hora de empezar a trabajar. Si su situación está legalizada y cuenta con un seguro, se podrán solucionar los diversos problemas que vayan surgiendo
La mejor manera para que tu hijo/a aprenda a valorar el esfuerzo que realmente se necesita hacer para ganarse la vida, es dejando que lo compruebe por sí mismo/a.