Los heuvos nunca deben ir crudos. Se introducirá
primero la yema cocida sobre el noveno mes; inicialmente
un cuarto, la semana siguiente media y al mes entera,
añadida al puré de medio día,
para tomar el huevo entero (con la clara) hacia los
doce meses. Puede sustituir a la carne, tomando 2-3
unidades por semana. La yema es buena fuente grasas,
ácidos grasos esenciales, vitamina A, D y hierro.
La clara aporta principalmente proteínas de
alto valor biológico, pero entre ellas se encuentra
la ovoalbúmina, con gran capacidad de provocar
alergias.