La placenta, que provee de nutrientes y oxígeno al feto y permite la
eliminación de desechos, continúa su crecimiento para alojar al bebé.
Ahora contiene miles de vasos sanguíneos que transportan nutrientes y
oxígeno desde su cuerpo al cuerpo del bebé en crecimiento. Tu hijo ya puede
coordinar los movimientos de las extremidades. Los ojos se ubican hacia
el frente de la cara. Ya los pulmones comienzan a prepararse
practicando movimientos de inhalación y exhalación de líquido
amniótico. Tu bebé mide 16 cm y pesa 155 gr aproximadamente.
