Su nombre proviene de la palabra griega “thymon” que significa valor, ya que en la antigüedad se creía que su aroma y consumo lo proporcionaba, como es el caso de los soldados romanos que tomaban baños con agua de tomillo para aumentar su vigor.
Características:
El tallo es cuadrado, de color marrón verdoso y a partir del segundo año leñoso. Las hojas son pequeñitas, ovaladas y puntiagudas; de color verde suave y aterciopeladas. Con aroma a limón o cítrico. Con flores lilas a purpúreas.
Florece de principios a mediados del verano y éste es el mejor momento para la recolección de las hojas.
La especie más utilizada en cocina es la T. Vulgaris, llamada también tomillo común o salsero, pero existe una gran variedad de especies que se diferencian por el colorido de sus flores y la intensidad de su aroma.
En cocina:
Se utilizan las hojas frescas o secas. Para aderezar salsas, especialmente si contienen vino, con el que combina muy bien. También se agrega a escabeches y las empanadas. Combina muy bien con aves y pescados.
En preparaciones calientes se recomienda agregarlo al final de la cocción o directamente una vez sacado del fuego.
Conservación:
Fresco: en bolsas de plástico en el refrigerador, se conservan varios días. Se puede congelar con agua en cubeteras (como cubitos) y descongelar para utilizar.
Seco: en recipientes herméticos al abrigo de la luz.
Nombre científico:
Thymus vulgaris
Inglés:
Thyme