Relájate y lee
Después de una noche sin pegar ojo, o de haber salido de marcha hasta las tantas, te levantas con una cara que te da pánico mirarte al espejo. No tienes fuerzas para nada y la falta de descanso se nota en tu rostro, en tu piel, en tus párpados hinchados y en los ojos enrojecidos. Es necesario poner en marcha la operación «como nueva» en unas horas.
No pretendas estar como nueva en un momento, lo primero es relajarte y estirar los músculos y las articulaciones, esto activa el sistema circulatorio. Respira aire fresco y oxigénate.
Desperezarse poquito a poco
Si dispones de tiempo, puedes hacer un poco de gimnasia, que podrías coger como rutina diaria. En su defecto, puedes bailar a ritmo de una música animada. Son buenos también los aromas, que actúan como un despertador para el cerebro, el limón, la menta, el eucalipto… Si no tienes, puedes verter unas gotitas de algún cítrico en un algodón y aspirar el olor para despejar la cabeza.
Agua y relajación
Si esta opción no te gusta mucho, puedes tomar una ducha relajante, masajea la piel con una esponja vegetal. Es importante que alternes con agua fría y caliente, esto hace que la piel tome un tono sonrosado.
Si te atreves, una de las mejores soluciones es un zumo de limón exprimido con una cucharadita de miel y después un desayuno que te de la energía suficiente.
Las noches sin dormir hacen que el cutis tenga un aspecto un tanto apagado. Hazte una limpieza a fondo con una exfoliación. Con esto pretendemos hacer que la piel luzca un aspecto saludable y respire mejor eliminando las células muertas. A continuación puedes pasar un hielo por la cara para activar la circulación, siempre y cuando no se tengan problemas de piel. Es conveniente hidratar el rostro después.
¿Bolsas y ojeras?
Después de una noche sin descansar es frecuente que aparezcan bolsas en los ojos u ojeras. Para combatir las bolsas parpadea unas diez o doce veces o date golpecitos en la zona con las yemas de los dedos. Unos algodones con manzanilla o té, también pueden aliviar estos síntomas.
Las ojeras tienen difícil solución en poco tiempo. Intenta disimularlas con un poco de corrector, de tono muy suave, para que no se note mucho.
Evita el exceso de maquillaje
Muchas veces, cuando nos vemos mala cara, tendemos a utilizar el maquillaje como herramienta para disimular las los efectos de no haber dormido lo suficiente. El excesivo maquillaje no hace más que empeorar la situación dando un efecto muy recargado.
Lo mejor en estos casos es una base de maquillaje suave y tonos muy naturales. Un poco de colorete, máscara de pestañas y brillo en los labios sería lo ideal para reavivar tu rostro.
Ahora ya puedes lucir una cara espléndida tras una noche en la que te ha sido difícil conciliar el sueño o si has preferido dedicar tu noche a salir a cenar o a bailar. ¿Quién lo va a notar?