Las ventanas podrían catalogarse, de un modo ciertamente metafórico, como los ojos de nuestras viviendas. No sólo permiten que la luz natural invada cada uno de los recovecos de nuestro hogar, sino que nos regalan el aire fresco necesario para que la casa permanezca bien ventilada.
En cocinas y baños es imprescindible que existan ventanas practicables, al menos en su parte superior, que permitan una ventilación adecuada.
En los dormitorios se precisa además que el aislamiento térmico y acústico sea perfecto, razón por la cual, resulta muy aconsejable el uso de doble acristalamiento.
En salones se imponen las grandes cristaleras de suelo a techo que permiten una estupenda iluminación y resultan muy espectaculares en los casos en que el paisaje merezca realmente la pena.
¿ Qué tipo de ventana elegir?
En la construcción de la vivienda, el apartado de cerramientos tales como ventanas y puertas, es el que más dudas suelen generar. Los materiales usados más corrientemente para la construcción de ventanas y puertas exteriores son el aluminio – simple o con rotura del puente térmico- el PVC y la madera. Cada cual tiene sus ventajas y sus inconvenientes, de ahí que la elección no sea demasiado fácil.
El revolucionario PVC
Del PVC cabe reseñar sus propiedades de aislamiento, su reducido peso, su insensibilidad a la humedad y su resistencia a la corrosión. Estas dos últimas cualidades son particularmente importantes para la parte exterior de la vivienda y tan solo se puede conseguir de forma duradera en otros materiales, como el aluminio, después de un lacado permanente. En las carpinterías de PVC se eliminan los problemas de filtraciones tan habituales en carpinterías de aluminio, debido al especial diseño de sus perfiles y a la colocación de juntas de estanqueidad continuas.
El tradicional aluminio
La ventaja del perfil de aluminio con puente térmico respecto al normal, es el aislamiento entre la parte interna y la externa del perfil que asegura un resultado perfecto tanto desde el punto de vista térmico como acústico; evitando además los problemas de condensación que, habitualmente, suele presentar el aluminio. De optar por carpintería de aluminio, es conveniente pues, hacerlo por el aluminio con puente térmico.
Hoy en día el aluminio se presenta en infinidad de acabados y colores, que van desde el tradicional anodizado – que regresa con particular fuerza -a la imitación del acero, pasando por una variada gama de colores entre los cuales podremos escoger, sin duda, el que mejor se adapte al diseño o al estilo de nuestra nueva vivienda.
El encanto de la madera
La carpintería de madera, un trabajo casi artesano por el que no todo el mundo está dispuesto a pagar. Atrás quedan aquellas mansiones de nuestros abuelos con ventanales de madera maciza realizados con cuarterones exquisitamente trabajados. Hoy en día es un capricho al alcance de unos pocos, debido principalmente, a su alto coste y al mantenimiento constante a que deben someterse para estar siempre impecables.
Su encanto es indudable en casas marineras o viviendas rústicas. Las inclemencias del tiempo hacen estragos en este tipo de ventanas, por esta razón cada vez están siendo más sustituidas por ventanas de PVC con acabados en imitación madera.
Y a cada marco su cristal…
Los cristales son el 50% de la ventana. Los marcos no son nada sin ellos y viceversa. Existen diferentes tipos de vidrios para colocar en puertas y ventanas exteriores y entre ellos podremos escoger el mejor se adapte a nuestros gustos y /o necesidades. Veamos los de uso más común …
Vidrio transparente: Es el más conocido y de hecho el más utilizado a nivel de viviendas, ya que permite el paso de la luz abiertamente, al tiempo que, apreciar a través de él lo que la ventana enseña. Sus tonos, dentro de la transparencia, pueden ser más o menos ahumados o tintados según nuestros gustos o preferencias.
Vidrio translúcido: Puede ser mateado, esmerilado o incluso tratado al ácido. Su aspecto es el de un cristal empañado. Habitualmente son blanquecinos, aunque también pueden encontrarse en otros colores. Su principal ventaja reside en que dejan pasar la luz ( acaso más tamizada) pero no permite la visión a través de él ni desde el interior, ni desde el exterior. Su uso es muy aconsejable en estancias con vistas a patios de luces o paisajes que no resulten especialmente agradables, así como en aquellas que precisen de una cierta intimidad de cara al exterior.
Vidrio espejo: Como su propio nombre indica este tipo de cristales tiene apariencia de espejo, con la particularidad de que ésta solo se aprecia desde el exterior. Este tipo de vidrios permite la visibilidad desde el interior hacia el exterior, no así a la inversa. Son muy utilizados en edificios de oficinas y en bloques de viviendas muy vanguardistas.