Casi a diario leemos titulares de suicidios, escuchamos o vemos en la televisión noticias de esta índole. Realmente lamentable que personas, en su mayoría jóvenes, decidan acabar con su vida, creyendo que es la solución a la realidad en que viven.
Dina, tiene 17 años y; son ya dos veces que intenta suicidarse “la primera vez tomé 10 pastillas porque no me sentía feliz y esta vez tome 50 pastillas de Diazepan porque tengo problemas con la mamá de mi enamorado. Creí que de esa forma dejaría de sufrir”. Narra con lágrimas en los ojos, pero afirmando con mucha seguridad que no sabe si otra vez lo puede volver a hacer “en el momento que tomé la decisión no me sentí muy insegura, pero aun así seguía tomando las pastillas”.
Carlos (26) “A veces creó que no le importo a nadie y que nadie va a sufrir si yo me muero; por el contrario no hago falta. Tomé lo que tenía a la mano: lejía, mezclándola con refresco; no sentí el sabor, ni el olor; pero francamente no me gusta hablar de esto“.
Así como estos testimonios hay muchos más; pero son pocos los que deciden hablar al respecto; pues se trata de su vida privada.
No sólo personas cuyos nombres quedan en el anonimato han sido presas de este monstruo, sino también personas muy conocidas, famosas, como por ejemplo la bella actriz norteamericana Marilyn Monroe, quien decidió acabar con su existencia de fama y glamour, pues era presa de continuas depresiones. El destacado escritor peruano, José María Arguedas quien parece que en su última novela incompleta “El zorro de arriba y de abajo”, escrita por razones terapéuticas, buscara ayuda o comunicara de su decisión, cegó su vida con un tiro de escopeta. La carismática animadora infantil, Mónica Santa María, quien hizo sonreír a miles de niños que disfrutaron de su talento y su alegría, con un disparo de revólver terminó, en plena juventud, con un futuro prometedor; entre tantos otros personajes que se podrían mencionar.
El intento de suicidio entre los adolescentes es el más frecuente en muchos países; pues este grupo de personas experimentan confusiones sentimentales, dudas sobre sí mismos, presión e incomprensión de sus padres siendo para ellos una solución a esa realidad incomprensible que tienen que enfrentar y no dudan en encontrar alguna forma irracional para acabar con su existencia.
Para dar certeza a esta inverosímil realidad, sólo en la ciudad de Trujillo (Perú), hay aproximadamente un total de 120 casos de intento de suicidio mensuales, donde el 75 a 80 por ciento son menores de 22 años, predominando el sexo femenino; en una proporción que por 10 mujeres hay un hombre. Esto nos permite tener una idea que es muy elevado el índice de intento de suicidio en esta ciudad, teniendo en cuenta que no es una extensa población, sino que estamos hablando de 788.236 habitantes entre Trujillo y distritos de la provincia.
La sustancia más utilizada, en intentos de suicidio, es el raticida, le sigue la lejía, los sedantes, kerosene, insecticidas. También se encuentran las armas blancas y de fuego como instrumentos del mismo hecho.
En Estados Unidos, país altamente desarrollado, el suicidio es la tercera causa de muerte más frecuente entre jóvenes de 15 y 24 años y la sexta causa de muerte entre 5 y 14 años de edad.
Pero sin embargo es Suecia el país con el mejor nivel de vida de su población, que ocupa el primer lugar seguido por Estados Unidos y el Japón que registran índices alarmantes de intentos de suicidios y suicidios.
Cómo identificar a una persona que puede intentar suicidarse
No es fácil reconocer a estas personas; pero con el siguiente perfil, ¡cuidado!; será mejor consultar con un especialista:
- Personas con continuas depresiones.
- Disminución del apetito y carencia de sueño.
- Aparecen ideas de suicidio; es decir continuamente comentan al respecto.
- Actitudes violentas, comportamientos rebeldes.
- Aburrimiento persistente, dificultades para concentrarse.
- Disminución en el rendimiento de sus actividades diarias.
- Comentarios continuos de que son malas personas, que no sirven para nada, o lanzar quejas como “no voy a ser un estorbo más”, ” no te veré otra vez”, “nada me importa”.
- Cambios pronunciados en su personalidad.
Qué hace que personas llenas de vida y en algunos casos con futuros prometedores busquen la muerte
Hay estudios que determinan que el factor preponderante en las personas que intentan varias veces suicidarse es el genético, al que se agregan otros factores determinantes, es decir las diversas situaciones que viven las personas y, luego, los factores desencadenantes que son los últimos acontecimientos que llevan a que se tome la decisión de quitarse la vida.
Es realmente muy triste que muchas personas, sobre todo jóvenes, escapen por esta puerta equivocada quizás por no haber encontrado la atención médica necesaria en su momento, de allí la importancia de conocer al respecto para de esta manera evitar más víctimas.
El destacado psiquiatra Hugo Vicuña Pérez, dice que existen niveles de prevención. Un primer nivel, llamado prevención primaria, donde hay que poner en alerta a la gente que es proclive al suicidio, aquellos que tienen continuos estados depresivos y que necesitan un tratamiento inmediato. La prevención secundaria es hacer un diagnóstico rápido para ser tratado a tiempo. Hay que entender -nos hace hincapié el profesional- que la depresión es una enfermedad muy seria que necesita de un especialista, pues muchas familias creen que solas pueden darle solución a este problema. Por ejemplo suelen decir, si yo me controlo porqué no lo puedes hacer tú; pero no es así, el estado depresivo verdadero es un sufrimiento terrible que no se puede controlar sin la atención de un médico. Los cuadros depresivos, por lo general, están asociados a conflictos personales que van a hacer de la persona, presa fácil del suicidio.
Por su parte, nos cuenta, que a lo largo de su carrera lo que más le impresionó fue el caso de una mujer que encontrándose en tratamiento psiquiátrico, se ahorcó con su propio pelo; y el caso de un señor cuyo diagnóstico era cáncer, se arrojó a un pozo de agua.
“Lo que ocurre es que, en el momento del acto, el que intenta suicidarse esta sublimado, se siente muy cómodo; por ello que inclusive no sienten el olor ni sabor desagradable de algunas sustancias que ingieren”, agregó el doctor Vicuña.
De igual manera, el psiquiatra Hugo Villanueva Gallo, refiere que la mayor parte de intentos y suicidios son debido a situaciones problemáticas, desajustes momentáneos de la persona, situación inadecuada en el hogar que lleva intentar suicidarse de manera brusca, llamado “corte circuito”, donde por ejemplo las personas, sobre todo adolescentes, que se les niega un permiso se sienten frustradas y, como respuesta a ello, intentan acabar con su vida. Las personas realmente depresivas caen con más facilidad en el intento de suicidio; y también aquellas que no expresan su agresividad y la vuelcan a sí mismos a través de un mecanismo llamado introyección.
El doctor Villanueva considera los casos de suicidio más bizarros, los cometidos por personas que padecen de patología mental, lo hacen de la manera más grosera y brusca, tal es el caso de aquellos que se lanzan de un edificio, se atragantan con algún objeto a nivel de la vía respiratoria. Me sorprendió mucho -nos cuenta- el caso de una mujer que sin llegar a tener un intento de suicidio real, con patología mental, escuchaba voces que le decían que estaba contaminada y debía purificarse; metió las manos al agua hirviendo y, no contenta con ello, metió sus manos al fuego, llegando al hospital con los huesos calcinados y definitivamente perdió las manos.
El tratamiento, en personas que intentan suicidarse, debe ser inmediato, analizando los factores desencadenantes e integrar a la familia como factor de sostén, agregó finalmente el forense.
Si piensas suicidarte recuerda:
No siempre resulta lo que se planea: Muchas personas al intentar quitarse la vida sólo lograron quedarse inválidos o con serias lesiones. Al arrojarse a las ruedas de un vehículo, está la posibilidad de perder un brazo, una pierna y hacer sufrir a una familia. La persona que ingiere sustancias tóxicas debe ser sometida a un lavado gástrico que de seguro no será nada agradable.
Un joven padre de familia agobiado por los problemas económicos se quita la vida creyendo de esa manera resolver su situación dejando dos menores huérfanos y deudas que deberán ser afrontadas por su esposa. Y así se pueden citar muchos ejemplos en los que podemos entender que el suicidio no es la solución para ningún problema. El enfrentar día a día una serie de dificultades es el condimento de la vida y es justamente ahí, en los problemas, que el hombre pone a prueba su inteligencia y su capacidad para resolverlos.
El mundo tiene sus contradicciones, mientras unos intentan terminar con su existencia otros luchan por vivir un día más, tales son los casos de aquellos con enfermedades terminales o aquellos que están condenados a vivir en una silla de ruedas, o los que no pueden ver la luz del día; pero sin embargo conservan la luz interior que les permite sentir que la vida está llena de esperanzas.
“Antes de saber que tenía cáncer y que moriría, no había disfrutado tanto de cada día, de cada amanecer , ni la más insignificante flor me parecía tan bella como ahora; pues el vivir es maravilloso”; decía un joven a quien la muerte sorprendió a escasos meses de convertirse en un buen médico, llevándose sus metas y sueños.
La vida es hermosa, no tiene precio; sólo se necesita un poco de paciencia, muchas ganas de vivirla y enfrentar todas las vicisitudes y misterios que ella encierra.